«El motivo de este evento es porque vemos demasiada vulnerabilidad entre el colectivo de inmigrantes, sobre todo aquella que intenta acceder a un arraigo y no puede o tarda mucho en conseguirlo», destacó el presidente del acto, Juan Pablo Blanco. El acto comenzó pasadas las 15.30 de la tarde con las ponencias magistrales de los abogados José María Sánchez, Beatriz Tobón, Carolina Quintana, Aina Díaz y Margarita Palos. Por la tarde, continuó con invitados como la defensora de la ciudadanía de Palma, Anna Moilanen; Ramón Montis, del Banc d'Aliments, una estudiante de Derecho Alexandra González; el presidente de la Asociación senegalesa Yapo, Cheik Ngalgou, un testimonio de un sobreviviente a la patera (Ndiaye Deme Niang) y la presidenta de la Asociación de Uruguay, Adriana Santana.
«Tenemos una visión errónea de las pateras y el asilo. Una gran parte de las personas en situación administrativa irregular nunca llegan a acceder a esos trámites, ni siquiera», destacó una de las letradas, Aina Díaz, durante su ponencia.
Porque el punto en común entre las charlas fue, precisamente, este: quién pide asilo, cómo se pide y qué pasa con la personas sin papeles. Esta especialista aportó datos relevantes, como que hay más de 120.000 solicitudes que llegan a al Oficina de Asilo y Refugio (OAR) y solo 3.000 son procedentes de África. «¿Cómo es posible?», se preguntó en relación a las pocas -o nulas- ventajas que tienen para solicitar refugio en nuestro país. «No hay que olvidar que muchas personas que no pueden solicitar protección vienen de países de los que huyen por guerra, hambre o persecución», reflexionó Aina Díaz.