Los atunes en descomposición echan a perder la pesca y pueden romper los aparejos. | Marilles

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El problema de los descartes ilegales de atún en el mar balear no cesa. La Fundación Marilles ha advertido, una vez más, de que existen barcos atuneros que arrojan al mar las capturas que mueren durante sus operaciones para que no se les compute en la cuota de pesca que tienen asignada cada una de las embarcaciones.

«Denunciamos el lanzamiento de atunes muertos por parte de atuneros que vienen a pescar en aguas de Baleares y pedimos al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España que actúe para erradicar estas malas prácticas», ha asegurado la fundación ecologista que vela por el cuidado del mar balear en sus redes sociales. Junto a la denuncia también han compartido un vídeo, que puede verse en esta información, en el que una barca de arrastre de Palma, concretamente la embarcación Es Llevant, pesca 1.000 kilos de atún podrido en la costa de Mallorca.

La organización ha lanzado esta hipótesis después de que el pasado jueves, una barca de arrastre de la flota de Baleares capturara accidentalmente cinco atunes de 200 kilos, muertos y en estado de descomposición, según ha informado a través de un comunicado. De esta manera, la fundación ha apuntado que esto podría deberse a los barcos atuneros que pescan en el mar balear para nutrir las granjas de engorde que hay Murcia y Tarragona y que lancen al mar los atunes que mueren entre la pesca, el traspaso a jaula o el transporte en las jaulas.

Las aguas de Baleares constituyen uno de las hábitats esenciales para el atún rojo. El Mediterráneo es una de las principales zonas de reproducción y, por tanto, uno de los lugares donde tiene lugar su desarrollo larvario. Una zona repleta de riqueza para el ecosistema marino que se ha convertido en el epicentro de una discutible práctica de los barcos de cerco en la costa de Mallorca. Los descartes de atunes rojos que son devueltos al mar muertos no cesan por parte de las grandes empresas pesqueras procedentes de la Península y el sur de Francia. Una práctica ilegal que supone echar por tierra todos los esfuerzos para conseguir una pesca sostenible que mantenga unos ecosistemas sanos y que necesitan de depredadores para mantener su equilibrio.

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Esta práctica tiene consecuencias terribles, tanto para los pescadores como para el ecosistema marino. Marilles apunta a que para el sector puede suponer la perdida de todo «un jornal de trabajo y poner en riesgo sus aparejos de pesca». Mientras que para el ecosistema supone el «derroche un pez de alto valor en un mar que es zona clave de reproducción de diferentes especies de atún».

Estas prácticas ilegales se habían detectado en años anteriores puntualmente, aunque ahora se han vuelto frecuentes y se han extendido a las costa cercanas a Mallorca, con el perjuicio que supone para la sobreexplotación del atún y las pérdidas para las embarcaciones de pesca de arrastre. Por este motivo, a través de un comunicado, la Marilles solicita una investigación a fondo para identificar a las embarcaciones y empresas responsables de esta «actividad ilegal» y el «alcance del problema», porque «ahora mismo no se sabe la cantidad de atunes muertos lanzados en el mar balear».

Por su parte, el director de la fundación, Aniol Esteban, asegura que «hace demasiado tiempo que sufrimos esta práctica ilegal y es hora de acabar con esta impunidad. El atún es una especie de gran valor estratégico para la flota balear y la pesca recreativa. Las Baleares tienen mucho atún, pero muy poco derecho a pescarlo. Que vengan otras embarcaciones a derrochar este recurso ante nuestras narices y lo hagan causando problemas a la flota balear es un insulto inaceptable. Cada atún derrochado hubiera sido un atún aprovechado por los pescadores baleares».

Y reclama al Ministerio de Pesca «acciones valientes e inmediatas para parar esta insensatez y redistribuir cuota de atún en favor de las embarcaciones Baleares». «No queremos un cementerio de atunes en nuestras aguas. Es evidente que algo huele mal en el negocio de las granjas de engorde de atún».