Miguel Bosé, Guillem Ferrer y Josep Pàmies en el acto del pasado viernes. | miquel angel canellas

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Los organizadores del acto negacionista celebrado el pasado viernes en el Molí d’es Comte con Miguel Bosé como invitado especial se exponen a cuantiosas sanciones económicas, según confirmó ayer a los medios la consellera de Salut del Govern, Manuela Romero.

«Aunque este tipo de actos son privados, la pseudoterapia atenta sobre la seguridad de las personas promoviendo supuestas técnicas o terapias que no están basadas en la evidencia científica y que, en muchos casos, incluso son peligrosas», señaló la consellera para indicar que se ha emitido un acta firmada por dos inspectoras del área de Farmacia que asistieron de incógnito a la jornada del viernes, bautizada como Libertad de expresión y libertad terapéutica y que, además de Bosé, reunió a varias voces de referencia en el ámbito del negacionismo y de la promulgación de terapias alternativas, como el curandero Josep Pàmies, la doctora Nadiya Popel (suspendida por el Colegio de Médicos de Baleares) o el médico antivacunas y activista Ángel Ruiz-Valdepeñas.

La consellera informó de que antes de la celebración del evento se hizo llegar a sus organizadores una notificación en la cual «les advertíamos de que no se podía promocionar en esa jornada ningún tipo de medicina, terapia o producto que no estuvieran basados en la evidencia científica y reunieran los criterios de seguridad adecuados».

Las dos inspectoras desplazadas al lugar «tomaron nota de todo lo que se estaba diciendo allí», información con la que se ha levantado un acta que puede derivarse en un expediente y que será derivada a Fiscalía para que valore la posibilidad de que se haya cometido un delito contra la salud pública, confirmó Romero.

En caso afirmativo, aseveró, las multas pueden ser muy elevadas. Tal es el caso de las impuestas al propio Pàmies por la Generalitat de Catalunya: el payés y su asociación, Dulce Revolución, han sido multados con dos sanciones de 600.000 euros cada una por promocionar el uso médico del clorito de sodio. «No hay medicamentos milagrosos, eso lo sabemos todos: no hay productos que curen a la vez el autismo, la esclerosis o la ELA», señaló la consellera.