El periodista, escritor y divulgador científico Antonio Calvo (actualmente trabaja en Red Eléctrica de España) es autor de dos ediciones, una española y otra mexicana, de la biografía de Odón de Buen. Calvo destaca que «con la creación del laboratorio, Odón de Buen puso Palma y Baleares en el mapa de la oceanografía, pero, lamentablemente, la ciudad no ha reconocido esa notable contribución. No hay ni una calle dedicada al naturalista».
Aunque Odón de Buen fue declarado Fill Adoptiu de Mallorca (distinción del Consell de Mallorca) en 2004, Calvo echa en falta «un reconocimiento de Palma a su figura. Se lo debe. He visto que ahora se reforma el Passeig Marítim. Un detalle podría ser dedicarle un tramo del paseo, concretamente donde está el actual Centre Oceanogràfic y donde se situaba el antiguo laboratorio, pero bueno, sólo es una idea-propuesta».
¿Por qué creó Odón de Buen ese primer laboratorio de biología marina en Palma? Calvo explica que «un tío de su esposa, Rafaela Lozano, residía en Mallorca y eso hacía que visitara la Isla con frecuencia. Aquí conoció a biólogos marinos y oceanógrafos franceses que realizaban estudios científicos. Como catedrático de Ciencias Naturales en Barcelona, revolucionó el trabajo de laboratorio y de campo en la investigación, y organizó visitas a los centros oceanográficos de Banyuls-sur-Mer -en Francia- y Mónaco. A partir de ahí es cuando surge la creación del laboratorio en Portopí. Incluso Santiago Ramón y Cajal estuvo dos meses de 1910 trabajando en el laboratorio, estudiando los ojos de los cefalópodos».
El periodista señala que «el laboratorio de Portopí incorporó las que serán las primeras embarcaciones propiamente oceanográficas de España. Se trataba de dos llaüts: el Lacaze-Duthiers, que era un llaüt requisado a Joan March por su uso en el contrabando, y el Bolívar. Lacaze-Duthiers fue un biólogo y zoólogo francés del siglo XIX».
Odón de Buen siguió investigando y publicando, y fue nombrado director general de Pesca durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera. A esta dirección general, de nueva creación, se le incorporó el IEO.
Odón de Buen se jubiló en 1934 como catedrático (en Madrid desde 1911) tras 45 cursos de enseñanza ininterrumpida, pasando por sus aulas un total de 25.000 alumnos. Sin embargo, no abandonó la investigación ni el trabajo en el IEO.
Su relación con el laboratorio de Palma no se interrumpió, pero eso le trajo graves consecuencias. El 18 de julio de 1936, fecha del levantamiento franquista, le cogió en Palma. Antonio Calvo indica que «Odón de Buen era republicano, librepensador, masón y siempre había demostrado compromiso social. A pesar de haber tenido relación con Miguel Primo de Rivera, a quien preparó para su entrada en la Academia Militar y con quien ocupó un cargo público, los franquistas le detuvieron y le encarcelaron un año en el Convent dels Caputxins, cuando tenía 72 años y estaba enfermo. Fue liberado por un canje, precisamente, con una hermana y una hija de Miguel Primo de Rivera. Odón de Buen, ya liberado, se trasladó a Valencia, Barcelona y Banyuls-sur-Mer, donde falleció su esposa en 1942. De allí pasó a Méjico, donde moriría en 1945. Hijos y nietos de Odón de Buen han tenido brillantes carreras profesionales en México».
Finalmente, el cuerpo de Odón de Buen fue retornado a su pueblo natal, Zuera, en el año 2000.
El nuevo buque insignia del IEO se llama Odón de Buen. Ha sido botado en Vigo y está en proceso de equipación científica. Ya existe un buque oceanográfico con el nombre del científico zaragozano, pero es de segundo orden. El nuevo Odón de Buen sustituirá al Hespérides como referente naval del IEO. Es de esperar que algún día venga a Palma.
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On hagi militars, feixistes, polítics corromputs, icones manipulats de ses oligarquíes obscenes, ... que es llevi tot lo demés.