Llorenç Galmés durante la ofrenda floral ante la tumba de Jaume II el pasado 12 de septiembre. | Pere Bota

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Tras celebrarla extraoficialmente el año pasado, el gobierno de PP y Vox en el Consell de Mallorca celebran este jueves la Diada del 12 de septiembre, como se venía haciendo desde que Maria Antònia Munar instaurase esta fecha en 1997. El PSIB, Més y el PI, como ya hicieron en 2023, ignorarán esta festividad al considerar que es algo impostado, pues desde 2016 el Pacte había recuperado la Diada del 31 de diciembre en homenaje a la entrada del rey Jaume I en 1229 a Madina Mayurqa. De esta manera, la oposición solamente acudirá por decoro a la entrega de los Premis, Honors i Distinciones que se entregarán por la tarde en el Teatre Principal de Palma.

El president del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, inaugura este jueves la exposición del Llibre de franqueses i privilegis del Regne de Mallorca junto al profesor de Historia de Derecho de la Universitat de les Illes Balears (UIB), Antoni Planas, que explicará su historia. Al acto asistirán la presidenta del Govern, Marga Prohens, y el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne. Al acabar, harán una ofrenda floral en el sepulcro de Jaume II en la Catedral de Mallorca.

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Trasfondo de la polémica

La disputa por celebrar una u otra fecha se limita a una interpretación de la historia enturbiada por la visión política. El 31 de diciembre, como fecha fundacional de la sociedad mallorquina tras el período musulmán, vincula la Isla con la catalanidad. Fue en ese momento en que la lengua y la cultura llegaron a través de los miles de colonos, especialmente ampurdaneses. Un centenar de historiadores firmaron un manifiesto el año pasado respaldando esta fecha como un «hecho fundacional». De hecho, desde el fin de la dictadura franquista y antes de la apuesta de Munar, se había celebrado el día 31 de diciembre.

El 12 de septiembre, por su parte, que rememora la jura del rey Jaume II, es visto como una expresión simbólica de mallorquinidad, que se presupone desvinculada de la catalanidad. Un hecho se que adapta más a la perspectiva del PP y Vox. Los historiadores que firmaron el comunicado, sin embargo, rechazan esta fecha «sin trascendencia histórica», como es la sucesión de un monarca a otro, porque «no alteró en absoluto la esencia jurídica y social del propio Regne de Mallorca».

El apunte

El PSIB lleva a los tribunales el decreto que legaliza en rústico

El PSIB ha presentado ante el juzgado (foto circular) un recurso contra el Decreto ley de simplificación administrativa. Dicen que el Consell basa su legalidad en la aprobación de la norma a partir de la disposición adicional séptima, «pero es evidente que esta actuación extraordinaria no queda motivada porque el mismo objeto principal del decreto es la simplificación administrativa y no la reforma de la normativa territorial, que es la que queda modificada de facto». Un norma que legaliza en rústico.