La playa de Cala Estancia, en Can Pastilla, con cielos despejados. | MARINA MUÑOZ

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Este sábado ha sido una jornada bastante dinámica, caracterizada por una mañana inestable con algunas gotas ocasionales y cielos cambiantes a lo largo del día. Durante la tarde, los intervalos nubosos irán despejándose gradualmente, dejando cielos mayormente despejados o poco nubosos. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que la situación anticiclónica persistirá en Baleares durante el domingo 29 de septiembre, con cielos predominantemente despejados o poco nubosos, aunque en algunos momentos podrían aparecer intervalos de nubes altas, sin que se espere un cambio significativo en las condiciones atmosféricas.

Además, el pronóstico del tiempo para el último día del fin de semana señala que durante la jornada se espera un ligero descenso en las temperaturas nocturnas, mientras que las diurnas experimentarán un leve ascenso. En cuanto al viento, comenzará soplando flojo de componente este, pero a lo largo de la tarde se prevé que cambie gradualmente hacia componente sur. Estas condiciones meteorológicas indican una jornada relativamente tranquila, sin grandes cambios bruscos, lo que favorecerá un clima estable durante gran parte del día.

Ya entre el domingo y el lunes las temperaturas subirán «de forma clara», de modo que a principios de la próxima semana pasarán a valores «por encima de lo habitual», sobre todo el martes y el día anterior, de acuerdo a las predicciones. Quizás podamos hablar para entonces, tras las jornadas frescas del fin de semana especialmente el sábado, de un «veranillo de San Miguel corto, no tan intenso como el de años anteriores», ha explicado Rubén del Campo, el portavoz de la Aemet.