Dirige el Museo Vasco de Historia de la Medicina, es profesor titular de Historia de la Ciencia en la Universidad del País Vasco y autor de libros y centenares de artículos sobre historia de las enfermedades y antropología médica.
Este miércoles hará un recorrido histórico desde los ‘catarrhus epidemicus’ del XVIII a la COVID.
En 2018 ya estuve en Palma hablando de la gripe española de 1918. Desde entonces han pasado muchas cosas y en esta sesión he decidido hablar del pasado, presente y futuro de las pandemias y plantear cómo han evolucionado hasta nuestro siglo.
¿Similitudes entre la gripe de 1918 y el COVID de 2019?
Se trata del mismo tipo de enfermedades de síndrome gripal. La gripe española afectó a más de la mitad de la población mundial, produciendo un gran impacto social. La reflexión que podemos hacer es que, después de cien años, un nuevo virus que brota en China y se expande por todo el mundo provoca, en su primera ola, una tasa de mortalidad de uno por mil habitantes, la misma que provocó el virus de la gripe de 1918. A pesar de los evidentes adelantos de la medicina en este siglo y de utilizar todos nuestros recursos, no hemos conseguido disminuir la mortalidad ni mejorar las tasas de 1918.
Se ha podido identificar el virus que originó la gripe española pero no el de la gripe rusa de 1889. Usted defiende que fue un coronavirus.
Sí, así es. Tras investigar la historia, epidemiología, sintomatología y virología de la pandemia de 1889, propongo una nueva narrativa, con al menos cuatro olas entre 1889 y 1894 y una sintomatología más cercana a la del COVID-19 que a las pandemias clásicas de 1837 y 1918. La hipótesis es que fue provocada por un coronavirus que tras su repentina y agresiva aparición fue perdiendo virulencia con los años hasta convertirse en uno de los cuatro coronavirus que causan resfriados comunes en humanos. Si la historia se repite, este también podría ser el destino del SARS-CoV-2 en los próximos años.
La historia de la medicina ¿permite predecir el futuro?
Ayuda mucho, nos permite conocer lo que ha ocurrido en el pasado y predecir el futuro. Para hacer frente a los nuevos retos debemos investigar cómo se desarrollaron las pandemias a lo largo de la historia y la evolución.
Hablando de futuro ¿cuáles son esos próximos retos?
A nivel científico, estamos muy preocupados con la gripe aviar, el virus H5N1, una variante con unas tasas de mortalidad mucho más elevadas que el COVID, alcanzando hasta el 50% de fallecimientos en afectados. Es un problema muy grave. Está circulando por todos los continentes y aunque apenas ha dado el salto a humanos, debemos estar vigilantes, ver cómo evoluciona y prepararnos para poder responder con prontitud.
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