La cartografía del plan territorial modificado incluía varios errores. En el de Alcúdia, se ampliaba el espacio sobre una zona de playa; en el de Bonaire, lo mismo; mientras que en el de Santa Ponça (imagen) se reducía por un lado y ensanchaba por otro. | M. À. Cañellas

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El PSIB ha querido aclarar este lunes que los 17 errores cartográficos que admiten haber cometido durante la tercera modificación del Pla Territorial Insular de Mallorca jamás pusieron «en riesgo» las cinco Àrees Naturals d’Especial Interès (ANEI) reconvertidas y rebajadas por error a la categoría inferior de suelo rústico común. Lo mismo han comentado de la ampliación sobre el mapa (y sin efectos, como ya señaló este diario) de los puertos deportivos de Alcúdia, Bonaire y Santa Ponça.

Los socialistas han defendido que los fallos de cartografía mencionados no podían derivar en una desprotección ambiental de esas áreas naturales porque prevalece la normativa autonómica por encima de la insular. «Algo que PP y Vox sí habrían hecho gustosamente», han considerado en un comunicado. El PSIB reduce los errores cometidos a «cuestiones inherentes al proceso de redacción de la modificación» y ha defendido que ahora se subsanan con su apoyo, como también informó este diario, al que acusa de haber cometido una «interpretación errónea de los hechos». Los fallos, sin embargo, provocaron que una promotora incluso presentara un contencioso tras detectar que en la cartografía insular se había convertido un suelo urbano en rústico.

La formación reivindica que durante su gestión se actualizó planimetría de Mallorca que había quedado obsoleta desde la última revisión del plan territorial de 2004. Un plan que en su momento se aprobó con numerosos errores materiales que tuvieron que ser corregidos posteriormente, según han señalado. Asimismo, el PSIB lamenta que el gobierno de PP y Vox en el Consell haya usado la información publicada para hacer oposición a la oposición, tratando de «desprestigiar» la «política digna» que defienden haber hecho con la regulación para ampliar centros comerciales o la regulación que supuso la aprobación del Plan de Intervención de Ámbitos Turísticos (PIAT). También creen que esta estrategia la hacen para ocultar que han legalizado unas 30.000 edificaciones.

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Un aviso del ministerio y otros fallos

Una empresa externa fue la encargada de elaborar la pasada legislatura la modificación del plan, algo común en estos casos debido a la falta de funcionarios para tramitar cambios normativos tan complejos. El problema es que las prisas del PSIB, que entonces gestionaba el Departament de Territori, por sacar adelante la modificación antes de las elecciones, impidió una correcta revisión por parte de los técnicos insulares. El Ministerio para la Transición Ecológica llegó a enviar varios meses después de la aprobación un informe alertando de que no se habían incluido en los nuevos planos la delimitación del dominio público marítimo-terrestre ni la franja de ribera de toda la costa mallorquina, así como las servidumbres de paso y protección.

Otro fallo sonado es la desaparición en el plano de una zona urbana donde actualmente se ubica el polideportivo Torre dels Enagistes de Manacor. Como la Rafa Nadal Academy está justo al lado, en el mapa se colocó sobre los terrenos del polideportivo. Si el ayuntamiento hubiera querido ampliar sus instalaciones, no habría podido por este error cartográfico. Asimismo, destacan las modificaciones de zonas urbanas en los planteamientos municipales, que en los planos se convirtieron en suelo rústico. Esto afectaba a la zona de Son Ametler de Palma, donde se presentó el recurso y en Es Murterar, en Alcúdia. También se detectaron incoherencias en los Felanitx, Ses Salines, Muro, Santa Eugència o Consell.

La comisión informativa del Servei d’Ordenació del Territori aprobó el pasado jueves (con el voto a favor el PSIB) la instrucción técnica que enmendará todos estos fallos, que desde el Consell calificaron de «chapuza». En el pleno insular de este jueves se prevé aprobar definitivamente la corrección.