Francina Armengol, entre más dirigentes y cargos del PSIB, brindó ayer en la sede del partido con los medios de comunicación. | Jaume Morey

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El año 2025 que asoma será un año de congresos en el socialismo balear. El último fin de semana de marzo se celebrará el del PSIB, el que reelegirá como secretaria general del partido a Francina Armengol, y luego vendrán los insulares y locales. El proceso habrá terminado en julio y si para entonces no se han adelantado las elecciones en Balears, se abrirá el proceso para definir las candidaturas. En principio -salvo que la presidenta del Govern, Marga Prohens, decidiera otra cosa-, se celebrarán en mayo de 2027.

Armengol, que no anunciará formalmente hasta el Consell Polític del próximo enero su decisión de revalidar como secretaria general (ocupa el cargo desde 2012), aludió este viernes a este proceso interno que se inició con el congreso federal de diciembre, el que reeligió a Pedro Sánchez. Lo hizo durante el brindis de final de año con los medios de comunicación. La dirigente socialista afirmó que «trabajaremos para volver a gobernar en 2027» y mostró su total sintonía con la dirección estatal del partido. «Desde el 41 congreso, el PSOE es más PSIB», indicó para referirse a algunas reivindicaciones históricas del socialismo balear que han sido asumidas parcialmente por la ejecutiva federal.

‘Governera’ y poltronas

La socialista se refirió en su intervención al momento político de Balears y dijo que estaba marcado «por la inestabilidad», cuyo último episodio fue la moción de censura que, en ese mismo momento, se estaba votando en Formentera. Armengol recordó que el PP de Balears decidió en su momento «abrazarse a la extrema derecha» y añadió: «Quiero expresar mi profunda tristeza ante la inestabilidad, irresponsabilidad y frivolidad de quien gobierna esta tierra». En su opinión, «nunca antes se había vivido algo así».

La presidenta del Congreso y expresidenta de Balears recordó su etapa y la de Francesc Antich y las comparó con la actual. «El PP tenía y tiene mucha governera, decía que venía a cambiarlo todo pero el resultado de su gestión ha sido la desregularización urbanística para favorecer a los suyos o la bajada de los impuestos a los más ricos, sus votantes». En resumen, dijo, «su única estrategia es la poltrona, ocupar el poder».

Para Francina Armengol, el PSIB sigue siendo la única alternativa y afirmó que la presidenta actual, Marga Prohens -a quien no respondió por las críticas que le hizo durante su brindis acusando a los socialistas de corrupción- «está más sola que la una y la están abandonando».