El PNV se plantea presentar una querella contra el presidente del
Gobierno, José María Aznar, y otros miembros del Gobierno si los
tribunales aceptan la que interpondrán contra el delegado del
Gobierno en el País Vasco, Enrique Villar por prevaricación y
calumnias, según han señalado en fuentes del partido.
El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, considera que estas
acciones forman parte de una ofensiva de los nacionalistas vascos
contra el Gobierno. Oreja calificó de «impecables» las
declaraciones del delegado del Gobierno en el País Vasco y se
preguntó por las querellas que él mismo «tendría que ir presentando
juzgado por juzgado» por «las cosas que han dicho los dirigentes
del PNV». Asimismo, Oreja explicó que la política de Estado contra
el terrorismo en los próximos cuatro años se centrará en la
neutralización del frente nacionalista, en la fortaleza del Estado
de Derecho, en la defensa de la validez del marco constitucional y
estatutario, así como en un cambio en los estados de opinión que se
sienten «acomplejados» ante el nacionalismo, algo señaló que no se
ha hecho o se ha hecho muy poco con anterioridad.
La intervención más dura fue la del portavoz del PNV José Juan
González de Txábarri, quien llamó «absolutista» a Oreja, pidió la
dimisión de Villar y le acusó de querer derribar al nacionalismo.
El resto de grupos parlamentarios pidieron al ministro que no
centre su política antiterrorista en combatir la ofensiva
nacionalista.
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