Un momento dela concentración contra el último intento de atentado.

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Los empresarios vascos temen la actitud de ETA tras el «serio» aviso que supuso el coche bomba colocado por la banda terrorista en la localidad de Getxo contra la «oligarquía» vasca. Así lo reconoció el presidente del Círculo de Empresarios Vascos, Alfonso Basagoiti, quien aseguró que «ETA siempre avisa como sabe, con violencia», a la vez que reconoció que los empresarios están recibiendo «masivamente» cartas extorsionadoras.

Después de que el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, expresara el sábado su deseo sobre que las víctimas del llamado 'impuesto revolucionario' de ETA no paguen a la banda terrorista «ni una peseta», el presidente del Círculo de Empresarios Vascos admitió que los empresarios están recibiendo «masivamente» cartas extorsionadoras. Basagoiti sostuvo que «a peor no podemos ir, porque la situación ya está lo suficientemente endurecida». Las palabras de Mayor, tras conocerse el atentado frustrado contra el hostelero guipuzcoano de Ordicia, fueron contundentes: «Confío, deseo y pido que los empresarios vascos no den ni una peseta a la organización terrorista porque nunca, ni pagando, obtendremos nuestra tranquilidad. Esta debe ser, además, una decisión unánime y sin fisuras».

En una entrevista publicada ayer por el diario 'Deia', Basagoiti reconoció que el coche bomba colocado por ETA en Getxo, la madrugada del pasado 25 de junio contra «la oligarquía» vasca, ha representado «un trauma importante» para el empresariado vasco. «No sólo por el hecho en sí, ya que llevamos en esta situación desde 1968, sino por el aviso serio que supone», aseveró.

Basagoiti señaló que los empresarios vascos apuestan por quedarse en Euskadi «para crear riqueza». «Esto es fundamental porque en la sociedad del conocimiento en la que vivimos, si hubiera fugas, la situación económica podría ser bastante peor», añadió. El presidente del Círculo de Empresarios sostuvo que el Gobierno vasco «ha procurado estar muy cerca de la clase empresarial, «aunque a veces podamos tener desencuentros en aspectos económicos, financieros, fiscales».