Paro en el pequeño comercio. Este martes 2'5 millones de
trabajadores y 900.000 establecimientos han sido convocados a una
jornada de huelga en protesta contra el decreto gubernamental de
horarios comerciales.
Piquetes informativos han presionado a los comerciantes para que
no abrieran sus negocios. Mientras, desde el Ejecutivo, Juan Costa,
defiende que las medidas aprobadas en junio favorecen al pequeño
empresario y ayudarán a crear 25.000 empleos anuales y que la
apertura es un derecho, no una imposición para los comerciantes.
Los sindicatos cifran el seguimiento de la huelga en el 70 por
ciento, mientras que las distribuidoras lo califican de
«irrelevante».
La huelga convocada por los sindicatos UGT, CC OO, USO y FETICO
en el sector del comercio ha afectado a más de 2 millones de
trabajadores. Según los pequeños comercios, abrir los fines de
semana, tal y como propone el ejecutivo, sólo beneficia a las
grandes superficies.
Piquetes informativos impidieron la apertura de grandes centros
comerciales. Los sindicatos convocantes consideran que la nueva
regulación, que permitirá ampliar las actuales 72 horas de apertura
comercial semanal a 90, posibilita jornadas de trabajo «salvajes»,
que perjudicarán a los trabajadores, y fundamentalmente a las
mujeres.
Los agentes sociales estiman que los más afectados serán los
pequeños y medianos comercios, ya que, según ellos, éstos no pueden
competir con las grandes superficies. Los sindicatos consideran
«innecesario» este decreto liberalizador puesto que, en su opinión,
la amplitud de horarios no significa aumenten las ventas.
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