Ibarretxe escucha la intervención de un miembro de la oposición durante el debate.

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El lehendakari, Juan José Ibarretxe, expuso ayer en el Parlamento vasco su plan de pacificación para el País Vasco, que se basa en tres compromisos fundamentales: el abandono de la confrontación y el insulto, la defensa del Estatuto de Gernika y la formación de un foro multipartito. Sin embargo, tanto populares como socialistas aseguraron que las propuestas del lehendakari llegan tarde, e insistieron en la necesidad de un adelanto electoral. El propio Ibarretxe, en su turno de réplica, criticó especialmente al PP, al que pidió que haga autocrítica por ser el único partido que no acudirá a la manifestación del sábado contra ETA.

Ibarretxe explicó su plan de pacificación para el País Vasco. Así, pidió a los partidos que se cierre la etapa de confrontación e insulto en la política vasca para dar paso a un nuevo periodo de diálogo y respeto mutuo. En este sentido, pidió valentía para separar el desarrollo de la política de la exigencia de paz. «La cultura de la confrontación no lleva a ninguna parte y es en la que nos hemos estado desenvolviendo en los últimos tiempos», dijo.

Además, como punto de encuentro entre los partidos, y no de confrontación, pidió un respeto por el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika, ya que en la actualidad «tiene el lamentable honor de ser la única ley orgánica que, después de 21 años, todavía no ha sido cumplida por parte del Estado español». Finalmente, el lehendakari reiteró su propuesta de crear un foro multipartito dedicado a «consensuar los procedimientos para abordar un proceso de convivencia y normalización política», así como el respeto a los derechos humanos.

En su turno de réplica, el portavoz del PP, Leopoldo Barreda, rechazó el triple compromiso que pidió el lehendakari, ya que éste no está legitimado ni política ni moralmente para encabezar la nueva etapa que defiende. Así, volvió a pedir un adelanto de las elecciones, puesto que Ibarretxe está al frente del Gobierno vasco gracias a los votos de EH. «Usted no puede encabezar ese Gobierno porque en ustedes no hay voluntad de rectificar», le espetó a Ibarretxe.