PP y PSOE intentarán, por separado, convencer a los partidos
reticentes al acuerdo antiterrorista. Tras la reunión de hoy, la
primera decisión que se ha tomado es abrir el diálogo
antiterrorista a todas las fuerzas que ya han mostrado su adhesión
al pacto: Coalición Canaria, Partido Andalucista, Unión del Pueblo
Navarro, Partido Democrático de la Nueva Izquierda, Unidad Alavesa,
Unión Valenciana, Partido Aragonés Regionalista y Partido
Regionalista de Cantabria. Estas reuniones tendrán lugar en el seno
de la Comisión, aunque todavía no se ha contemplado la forma en que
estos partidos se incorporarán al acuerdo, ni tan siquiera si
formarán parte de la Comisión o sólo de las conversaciones.
Los portavoces parlamentarios de PP y PSOE, Luis de Grandes y
Jesús Caldera, respectivamente, informaron en rueda de prensa de
que, de hecho, ni siquiera sería necesario la firma del acuerdo por
todos los partidos que se han adherido al pacto, ya que lo que se
busca es compartir los principios del mismo. Ni De Grandes ni
Caldera se mostraron preocupados porque IU y CiU no se hayan sumado
todavía al acuerdo, y aseguraron que no quieren interferir en sus
«reflexiones».
No obstante, y dado que la Comisión no abrirá el diálogo a
aquellas fuerzas políticas que no se adhieran al pacto, PP y PSOE
por separado tratarán de establecer reuniones con el resto de
partidos para tratar de convencerles.
Además, la Comisión seguirá estudiando la forma en que se puedan
incorporar al pacto las organizaciones sociales. Los sindicatos
mayoritarios, UGT y CC OO, ya han mostrado su adhesión, así como la
CEOE y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Todavía quedan pendientes las reuniones con los representantes de
otras asociaciones como el Foro de Ermua o el Movimiento contra la
Intolerancia.
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