Según fuentes jurídicas, los detenidos son Jon Zubiaurre, Asier
García y Aitor, un hermano de éste, que constituirían un comando
legal, al mismo nivel del 'comando totto' dentro de los tres que
había en el «complejo Donosti». Zubiziaurre y García fueron
detenidos en una cabina telefónica cuando estaban llamando para
atribuirse el atentado y comunicar donde se encontraba el dueño del
coche que habían robado para cometerlo y que explosionó cuando
Totorika y otro miembro de la Ertzaintza, que resultó herido, se
acercaron al vehículo para inspeccionarlo.
Las investigaciones realizadas apuntan a que los autores del
atentado avisaron a la Ertzaintza diciendo que había incidentes de
violencia callejera para que acudieran al lugar donde habían dejado
el coche-bomba e hicieron explosionar el mismo cuando los agentes
se acercaron para inspeccionarlo, con lo que se convierte en el
primer atentado indiscriminado contra la Ertzaintza por parte de
ETA.
Una furgoneta con ocho efectivos de la policía autonómica y un
vehículo grúa de este cuerpo se acercaron al lugar donde se
encontraba atravesado el vehículo, un monovolumen. Al comprobar que
no era necesaria su intervención, se retiraron y decidieron llamar
a una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Ertzaintza, integrada
por Iñaki Totorika, de 25 años, y su compañero, que responde a las
iniciales J.L.A.S. Al acercarse para inspeccionarlo, los etarras
hicieron explosionar el coche-bomba cargado con entre 10 y 15 kilos
de dinamita. El vehículo quedó convertido en un amasijo de hierros,
mientras Totorika resultó herido de extrema gravedad, al quedar con
las piernas amputadas y abundantes heridas de metralla que le
hicieron perder mucha sangre, falleciendo poco después de ser
trasladado a un hospital.
El propietario del vehículo utilizado por los terroristas, un
hombre de 54 años, fue encontrado atado y amordazado sobre las dos
de la madrugada, después de que un comunicante anónimo que dijo
hablar en nombre de ETA, alertara del hecho.
El ministro del Interior, Mariano Rajoy, aseguró ayer tarde que
los detenidos tras el atentado «son personas muy jóvenes que
formaban parte de Haika». En el mismo sentido se pronunció el
consejero de Interior del Gobierno Vasco, Javier Balza, al asegurar
que la acción confirma la relación entre los actos de 'kale
borroka' y la propia banda, puesto que se utilizaron incidentes
callejeros para encubrir la bomba. Balza afirmó que, con la
detención de estas personas, el «talde» del 'comando Donosti'
responsable del atentado en Hernani está en «vías de ser
desarticulado». No obstante, advirtió de que «todavía puede haber
capacidad operativa en Guipúzcoa».
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