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El Consejo de Ministros aprobó ayer un Decreto por el que se revalorizan las pensiones para 2002 en el 2%, el mismo porcentaje que la inflación prevista, y por el que se establece el abono de una paga extraordinaria a todos los pensionistas para compensar el desvío del IPC en el año 2001. La Seguridad Social destinará 290.805 millones (1.747'78 millones de euros) al pago de esos conceptos, de los que 172.996 millones (1.039'73 millones de euros) corresponden a la revalorización, 61.150 millones (367'52 millones de euros) a la paga extraordinaria y 56.659 millones (340'53 millones de euros) a su consolidación.

Esta compensación, que será del 0'7 por ciento, quedará consolidada en la base de la pensión para el 2002 y los ejercicios futuros, con el fin de garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo, tal y como establece la Ley de Racionalización y Consolidación de Pensiones. Además de a las pensiones contributivas y no contributivas, esta actualización se aplicará también al límite de ingresos para los beneficiarios de asignaciones económicas por hijo a cargo y a las cuantías de dichas asignaciones a favor de minusválidos con dieciocho o más años.

El Real Decreto aprobado hoy incluye las mejoras en las pensiones mínimas de jubilación, viudedad y SOVI aprobadas en desarrollo del Acuerdo para la Mejora y el Desarrollo del sistema de protección social, suscrito el pasado 9 de abril entre Gobierno y organizaciones sociales. Conforme a estas mejoras, las pensiones mínimas de jubilación y viudedad de menores de 65 años se incrementarán el próximo año un 4'2 por ciento (un 3'5 por ciento correspondiente a la subida acordada por los firmantes del acuerdo de pensiones, y el 0'7 por ciento por la consolidación de la desviación de los precios en 2001).

Las pensiones del antiguo Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) se incrementarán un 3'2 por ciento (un 2'5 por ciento por la subida del acuerdo de pensiones y un 0'7 por ciento por la consolidación de la desviación de los precios). También en el ámbito del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, el Gobierno tramitó un real decreto que establece el nuevo sistema de jubilación gradual y flexible que permitirá a los mayores de 61 años retirase del mercado laboral aunque hayan empezado a cotizar después del 1 de enero de 1967.

El documento establece además la posibilidad de que los mayores de 65 años permanezcan en el mercado laboral compatibilizando su empleo con la percepción de la pensión de jubilación, para lo que destina en 2002 más de 62.000 millones. El Gobierno acordó igualmente el nuevo salario mínimo interprofesional para el próximo año, que queda fijado en 73.576 pesetas (442'20 euros) al mes o en 2.453 pesetas diarias (14'74 euros).