El Gobierno no tiene constancia formal de que haya algún español
entre los detenidos por EE UU en Afganistán, mientras se sigue
investigando la nacionalidad de una persona trasladada a la base
norteamericana de Guantánamo, que pudiera ser ceutí. El ministro de
Defensa, Federico Trillo, indicó ayer que dos de los detenidos por
Estados Unidos han resultado ser pakistaníes con pasaporte español
«falso», en tanto que se investiga a otra persona, de nacionalidad
«dudosa».
El responsable de Exteriores, Josep Piqué, recordó que todos los
españoles detenidos en el extranjero tienen atención consular por
parte española y que así sucedería si se confirma que hay un
español entre los supuestos miembros de Al Qaeda capturados por EE
UU. Según Piqué, se ha recibido de los EEUU una petición de
información con la aportación de pruebas sobre ese ciudadano
posiblemente español. Señaló que la información de la que se
dispone enviada por EE UU se refiere a «ciertos elementos de
identificación de uno de los detenidos que, aparentemente, puede
coincidir con un ciudadano español de origen ceutí».
Las autoridades estadounidenses comunicaron a la policía
española la posibilidad de que hubiera un español en la base y,
para su confirmación definitiva, las fuerzas de seguridad españolas
les remitieron las huellas del ciudadano que se supone pudiera ser
el prisionero. Ahora, la policía española está esperando el
resultado del cotejo de las huellas enviadas con las del preso. El
delegado del Gobierno en Ceuta, Luis Vicente Moro, confirmó que la
policía española intenta determinar si el preso es efectivamente un
ciudadano ceutí. Para ello, explicó Moro, se está comparando la
huella dactilar de este preso con la de Hamed Abderraman Ahmed,
nacido en Ceuta el 22 de septiembre de 1974 y sin antecedentes
policiales.
Indicó que las investigaciones de la Policía Nacional pretenden
determinar «si estamos hablando de la misma persona, puesto que en
Ceuta coinciden muchos nombres de musulmanes». La familia de Hamed
Abderrahaman Ahmed asegura desconocer su paradero desde hace cinco
o seis meses y explica que la policía «ha venido pidiendo su
pasaporte». La madre de Hamed Abderrahaman Ahmed explicó que «él me
dijo que se iba a trabajar a Madrid e Inglaterra... se fue cuando
yo estaba en el médico. No me ha llamado». Los padres del presunto
preso ceutí abandonaron ayer su domicilio en la barriada del
Príncipe Alfonso de Ceuta ante el acoso de los periodistas.
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