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La segunda comparecencia en el Congreso del vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para explicar lo sucedido con el 'Prestige' fue aún más tensa que la primera. El PSOE esgrimió un documento de Salvamento Marítimo para demostrar que el Gobierno mintió y que cambio de rumbo fue lo que provocó que el vertido del buque se convirtiera en una catástrofe. Rajoy acusó al portavoz parlamentario socialista, Jesús Caldera, de manipular lo que realmente sucedió con el único fin de hundir al vicepresidente, y exigió al socialista que dimita.

Caldera fue muy crítico con Rajoy. El portavoz socialista dijo que el accidente del 'Prestige' derivó en catástrofe por la gestión del Gobierno. Según dijo, los técnicos ofrecieron hasta tres posibles destinos del buque, pero apuntó que lo más grave fue que después de dos días rumbo norte se decidiera dirigir el barco al sur, en contra del criterio técnico.

En su comparecencia del día 5, Rajoy atribuyó precisamente a los técnicos la decisión de alejar el barco, pero Caldera dijo que fue el Gobierno quien la tomó. Para demostrarlo, mostró documentos de la Sociedad de Salvamento Marítimo con la transcripción de las órdenes dadas el 8 de diciembre, donde consta que se cambió el rumbo «ante la insistencia de Marina Mercante». «Se alejó el barco en la dirección incorrecta y eso favoreció la ruptura del buque y la extensión del vertido», dijo.

La respuesta de Rajoy fue igualmente dura. «Es de los casos más zafios que he visto en mi vida», afirmó, tan sólo para hundirle a él. En su explicación, Rajoy aseguró que el portavoz socialista omitió la primera parte de la secuencia de los hechos, la que demuestra que el cambio de rumbo se produjo a las 3.00 horas del día 15 de noviembre y que a las 8.30 se produjo un nuevo cambio porque no se había cumplido la orden de alejamiento de la costa dada por Marina Mercante.