La nueva ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, se
comprometió ayer, en la toma de posesión, a resolver
«definitivamente» las secuelas dePrestige e impulsar medidas para
que este tipo de accidentes no se repitan, así como a llevar
adelante el Plan Hidrológico Nacional (PHN).
En su intervención, Rodríguez declaró que es un «orgullo» ser
ministra del Gobierno y una «satisfacción» serlo en este
Ministerio, y avanzó algunos de sus objetivos, entre ellos resolver
definitivamente las secuelas dePrestige, paliar los efectos de las
reciente crecidas del Ebro, resolver los problemas del agua,
llevando adelante el PHN, y asegurar el desarrollo sostenible para
las generaciones futuras.
El vestíbulo del salón de actos del Ministerio de Medio Ambiente
fue el escenario del traspaso de poderes entre el ministro
saliente, Jaume Matas, y la nueva titular, en un acto al que
acudieron los ministros de Agricultura, Pesca y Alimentación,
Miguel Arias Cañete, y de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, así como
altos cargos de Medio Ambiente, Interior y Hacienda, donde era
secretaria de Estado de Presupuestos.
Tras afirmar que representa un «honor» y una «responsabilidad»
recoger el testigo de Jaume Matas, que «deja el listón muy alto»,
Rodríguez subrayó que Medio Ambiente es «un ministerio de gasto» y
que en los últimos 31 años su «patrón» ha sido el Estado.
Apostó por hacer las cosas «lo antes posible», pero «el medio y
largo plazo tienen mucha importancia, y más en un ministerio como
el de Medio Ambiente», agregó Rodríguez, quien ayer juró su cargo
en el Palacio de la Zarzuela ante el Rey y cuyo nombramiento
aparece publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
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