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La policía detuvo la pasada madrugada a doce presuntos etarras que, junto a otros 53 arrestados en tres operaciones anteriores este año en España, habían sido seleccionados por ETA para recomponer la «estructura básica» de la organización terrorista.

El ministro del Interior, Angel Acebes, explicó los detalles de esta operación, coordinada por el juez Garzón, que se ha saldado con nueve detenciones en Guipúzcoa, dos en Navarra y una en Sevilla, además de 15 registros domiciliarios, en los que se ha encontrado diversa documentación, tanto en papel como en soporte informático, que se está analizando.

La operación es continuación de las que se desarrollaron los pasados días 19 de febrero, con 15 detenidos, 1 de abril, con nueve, y 8 de octubre, con 34, 29 de ellos en España y cinco en Francia, con lo que es la cuarta practicada por la Policía a raíz de la documentación incautada al dirigente etarra Juan Ibón Fernández de Iradi «Susper», detenido en Bayona el 19 de diciembre de 2002, pero dos días después se fugó de la comisaría de esa ciudad.

Estas cuatro operaciones atacan la decisión de ETA de recomponer «de una manera potente» su «estructura básica en España», después de haber sufrido los golpes de las fuerzas de seguridad en los años 2001 y 2002.

Esta decisión le llevó a la banda a comenzar a reclutar de forma seleccionada a nuevos miembros con destinos diversos, como el aparato de captación, el de información, el logístico y los comandos operativos, con la finalidad de recomponer la «estructura básica» de ETA en España, fundamentalmente en el País Vasco y Navarra.