TW
0

La investigación del juez Baltasar Garzón sobre la célula española de Al Qaeda liderada por Imad Eddin Barakat, «Abu Dahdah» ha revelado conexiones entre el hombre de confianza de éste, Amer Azizi -inculpado por los atentados terroristas del 11-S en EE UU-, y los presuntos autores materiales de los atentados del 11-M.

En una ampliación de sus acusaciones de septiembre de 2003 contra Amer Aziz, Garzón le imputa ahora, además de pertenencia a Al Qaeda, una responsabilidad directa en los asesinatos terroristas cometidos en Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001 y solicita el envío de comisiones rogatorias a Estados Unidos y el Reino Unido, para indagar sobre él.

En un auto notificado ayer, el magistrado afirma que, según los datos remitidos por las autoridades de Turquía, en octubre de 2000 tuvo lugar en Estambul una reunión en la que participaron, entre otros, Azizi y Said Berraj, contra quien el juez Juan del Olmo, que investiga los atentados de Madrid, dictó el pasado 30 de marzo una orden de busca y captura internacional.

Este dato estaba en poder de la Justicia española desde varios meses antes del 11-M, pero la resolución explica que Berraj no fue «identificado como tal» por la Unidad Central de Inteligencia de la Policía española hasta el pasado 12 de marzo, el día siguiente de los atentados, gracias a las fotografías remitidas desde Turquía.

Tanto Azizi como Berraj están hoy en paradero desconocido, ya que el primero escapó cuando, en noviembre de 2001, fue desarticulada la célula española de Al Qaeda, mientras que aún se trata de averiguar si el único de los siete terroristas que el pasado 3 de abril se suicidaron en Leganés que todavía no ha sido identificado es Berraj, para lo que se han solicitado muestras de ADN a Marruecos.