La oficina de Atención a las Víctimas del 11-M comenzará a funcionar el lunes

TW
0

EP/EFE-MADRID
El Grupo Popular ya ha registrado su petición de una comisión de investigación sobre el 11-M en el Pleno del Congreso. El núcleo de la investigación, según los populares, debe ser lo sucedido entre el 11 y el 14 de marzo, aunque admiten la posibilidad de incluir «antecedentes», siempre y cuando tengan un nexo con «hechos o actitudes» que se produjeron esos días. El portavoz del PP, Eduardo Zaplana, no quiso hablar de «una mano negra», pero sí dijo que el Gobierno popular tuvo la «sensación» de que «alguien jugaba» con él en aquellos días.

Al PSOE no le han gustado éstas palabras. Su secretario de Organización, José Blanco, pidió a los populares que midan sus reacciones. «Más le valdría ser prudentes, porque va a ser difícil de explicar la cantidad de cosas que se ocultaron a todos los españoles», aseguró, «a tenor de los informes que se van conociendo». Tampoco le han gustado a Blanco las acusaciones del ex director general de la Policía Agustín Díaz de Mera, quien dijo que el PSOE podría haber recibido filtraciones.

Los populares quieren que la comisión de investigación «restablezca la verdad lo más exhaustivamente que quepa» sobre lo sucedido entre el 11 y el 14 de marzo y los «antecedentes y consecuentes que resulten coherentes con aquella finalidad». Esto supone analizar los atentados de Madrid y las «innegables consecuencias políticas» en las elecciones generales que se produjeron tres días después. Zaplana explicó que la comisión debe estudiar si existían indicios suficientes «que aconsejasen la adopción de medidas de seguridad preventivas excepcionales, la adecuación y diligencia de las iniciales averiguaciones policiales y de los servicios de información», los flujos de información generados por aquellas informaciones, tanto por parte del Gobierno y otros partidos políticos como por los medios de comunicación, «y las transgresiones de las previsiones legales sobre el desarrollo de la jornada de reflexión».

Preguntado por la posibilidad de investigar esos «antecedentes», Zaplana aseguró que «el debate que se ha suscitado en la opinión pública española y los medios de comunicación es sobre lo que ha acontecido entre los días 11 y 14». «Negar eso es negar la realidad», dijo, y concretó que el PP está dispuesto a incluir «todo lo que tenga un nexo y que tenga que ver con lo ocurrido esos días», todo lo relacionado con «los hechos, comportamientos y actitudes» de aquellos días, pero no para «desviar la atención».