La Delegación del Gobierno y el Cuartel General del Ejército de
Tierra abrieron ayer una investigación para aclarar un simulacro de
atentado terrorista desarrollado por militares en el centro de
Madrid el pasado miércoles, que provocó la intervención policial y
el susto de los ciudadanos.
Consideró inaceptable la situación de riesgo que se pudo crear, al
irrumpir personas armadas aunque sean de fogueo en un
establecimiento comercial, creando alarma y pudiendo llegar a un
grave incidente, dado que la cafetería donde se realizó suele estar
frecuentada por escoltas de cargos municipales y del Consejo de
Estado.
El delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez, explicó
que la investigación abierta pretende aclarar las responsabilidades
por la realización de dos simulacros, que no fueron comunicados ni
a la Policía ni a Interior, algo que consideró «inaceptable».
Así respondía la Delegación de Gobierno ante una información de
la Cadena Ser en la que se daba cuenta de que el Ejército simuló
dos atentados en pleno centro de Madrid, sin avisar a la
Policía.
«No podemos aceptar que se lleven a cabo simulacros en estos
términos, sin seguir los protocolos de actuación que exigen su
comunicación a la Policía y a las autoridades», afirmó Méndez.
Por su parte, el Jefe de Estado Mayor del Ejército (JEME),
general José Antonio García González, ha ordenado investigar «a
fondo» el simulacro de atentado terrorista desarrollado por
militares en el centro de Madrid el pasado miércoles y prevé
sanciones disciplinarias contra los responsables.
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