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La Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados aprobó ayer, con la única oposición del PP, una proposición no de ley del Grupo Parlamentario Socialista por la que se declara «probado, más allá de toda duda razonable», que en marzo de 2003, Irak «no poseía ni estaba en condiciones de poseer armas de destrucción masiva».

Antes de la votación, el PSOE se comprometió ante el PP a no volver a recordar el tema de la guerra de Irak ni sus palabras para justificarla en sus futuros debates políticos con los populares. A pesar de esto, el PP votó en contra de la proposición no de ley.

En la misma jornada la Cámara Baja aprobó otra proposición, en este caso por unanimidad, en la que se condena la violación de los Derechos Humanos en el país por parte de las fuerzas estadounidenses, en particular en el centro de detención de Abu Ghraib.

El portavoz socialista, Rafael Estrella, afirmó que el objetivo de la iniciativa es «constatar un hecho hoy incuestionable», además de «rendir homenaje» a las víctimas de esta guerra, «víctimas inocentes, la mayoría civiles, pero también soldados de EEUU, de Gran Bretaña, de Italia y nuestras víctimas, dos periodistas y once militares españoles que murieron sin saber que no morían por una causa justa».

«No podíamos cerrar una etapa tan triste, la de mayor confrontación política y social vivida en la última década, sin dejar constancia de la verdad, hoy establecida fuera de toda duda». El texto «contiene una profunda e intensa significación», ya que «evoca una serie de acontecimientos en torno a la existencia de armas de destrucción masiva en Irak que justificaron una guerra cuyas consecuencias conocemos y estamos viendo hoy», continuó. El portavoz del PP, Gustavo de Arístegui, lamentó que los socialistas intenten «desprestigiar e incluso mancillar» al ex presidente, cuyas palabras, según dijo, han sido claramente «manipuladas» en la proposición y afirmó que el informe Duelfer demuestra que Husein tenía «capacidad industrial desde los 90 para reanudar la fabricación de armas de destrucción masiva».