El Gobierno reiteró ayer su garantía de que no hay negociación
alguna con ETA y de que, si la hubiera, no se pagaría un precio
político, aseveración de la que sigue desconfiando el PP al acusar
al Ejecutivo de impulsar una campaña de manipulación para ocultar
la gravedad del proceso que ha abierto.
«ETA es una organización terrorista que sigue activa y con
capacidad de atentar y de la que podemos prever que siga
utilizándola; esos son los hechos a día de hoy y haríamos bien en
ceñirnos a los hechos», subrayó.
Fueron varios los miembros del Gabinete presidido por Zapatero
los que ayer se refirieron a esta cuestión, entre ellos el ministro
del Interior, José Antonio Alonso, quien aseguró la inexistencia de
negociaciones con ETA y pidió que no se trabaje sobre hipótesis
porque se enturbia la vida política.
El ministro se resistió a dar por finiquitado el Pacto
Antiterrorista y consideró que el PP «tiene que estar claramente en
la política antiterrorista desde la unidad de los demócratas» y «en
cualquier proceso que permita acabar con ETA». En la misma línea,
el ministro de Justicia, López Aguilar, negó que la resolución
aprobada por el Congreso sobre una posible solución dialogada a la
violencia sea una «invitación» a negociar con ETA, y reiteró que
sólo podrá haber diálogo después de que la banda terrorista sea
«derrotada» y abandone «definitivamente» la violencia.
Ni Alonso ni López Aguilar, cuyas declaraciones fueron
criticadas hoy por la ilegalizada Batasuna, se refirieron a las
declaraciones de ayer del dirigente de esta formación Arnaldo Otegi
en las que interpretó que esa resolución del Congreso asume la
propuesta presentada por su formación el pasado noviembre.
En el Partido Popular, su secretario general, Àngel Acebes, negó
que haya un pacto con el PSOE para rebajar la tensión y acusó al
Gobierno de impulsar una campaña de «intoxicación», «intimidación»
y manipulación» para «ocultar la gravedad del proceso que ha
abierto» y que pone el futuro «en manos de ETA-Batasuna».
Por su parte, el presidente de la Junta de Extremadura, Juan
Carlos Rodríguez Ibarra, dijo ayer que el PSOE tiene que ser
generoso y tener paciencia con el PP, y añadió que el presidente
Zapatero, es «un patriota» porque, según afirmó, «hay que querer
mucho a los ciudadanos españoles para sentarse a hablar con los
canallas de ETA». Ibarra tildó a Otegi de «secuestrador» y señaló
que la única solución de la banda terrorista será la rendición, en
cuyo caso «no deberían creer que tienen la llave de la cárcel».
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