La banda argumenta que la actitud de partidos como EHAK es una renuncia a su principal eje de actuación.

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Un documento interno de la banda terrorista ETA, firmado por un supuesto sector de la misma que se presenta como 'J. Agirre', critica que la izquierda abertzale esté aparcando el proyecto independentista y «subordinándose al Estado», según una información de la Cadena Ser.

El documento recoge que, «aparcado el proyecto independentista», sólo se puede negociar un nuevo Estatuto para Euskadi con «rango nacional».

En el escrito, de tres folios y titulado 'Girando hacia el desastre político', los firmantes alertan de que el papel político de ETA se está reduciendo. Para los autores, la Declaración de Anoeta supone «una renuncia de hecho a principios que hasta ahora constituían nuestro eje de actuación». Incluso critican que se utilicen frases por parte de Batasuna como «sacar el conflicto de las calles para llevarlo a una mesa de negociación».

Para esta sector de ETA militar el compromiso de que no habrá una declaración unilateral de independencia y de que este compromiso se va a aplazar sin fecha suponen cambios sustanciales en lo que hasta ahora se llamaba «nacionalismo radical».

En esta estrategia enmarcan los tres votos de parlamentarios de Sozialista Abertzaleak dieron al Plan Ibarretxe el pasado 30 de diciembre. Los autores del documento advierten que «los socialistas, y en este momento, lo más que están dispuestos a ceder es a un estatuto a la catalana, de rango nacional», donde se reconozca el autogobierno en el marco de la Constitución Española, sin posibilidad de incluir el derecho de autodeterminación.

Finalizan su escrito asegurando que la crisis actual de la izquierda abertzale sólo se va a superar retomando la idea de la independencia y de la soberanía política. Asimismo, advierten de que si continúa «la represión contra la izquierda abertzale», se podría llegar «en algún momento a romper la cuerda».

En relación con los resultados de las últimas elecciones, los firmantes reconocen que éstos han dado «cierta moral a las bases de la izquierda abertzale», pero advierten de que «su impulso corre riesgo de agotarse».