TW
0

ETA hizo estallar la pasada madrugada cuatro pequeños artefactos explosivos, en una jornada en que se conmemoró el XXVI aniversario de la aprobación del Estatuto de Gernika y horas después del comunicado en el que rechaza la posibilidad de «un nuevo pacto autonómico».

La primera de las explosiones se produjo a las 2:10 de la madrugada junto al juzgado de Berriozar (Navarra), media hora después explotaba otra pequeña bomba en los juzgados de Ordizia. A las 7:40 estallaba el artefacto colocado en el juzgado de Amurrio (Alava) y una hora después lo hacía el último de los cuatro artefactos en el juzgado de Gernika.

Los cuatro atentados de ETA, uno en cada uno de los territorios del País Vasco y Navarra, no produjeron daños personales y los desperfectos materiales fueron escasos.

En todos los casos las bombas estaban compuestas por una pequeña cantidad de explosivo, de entre medio y un kilo, según la Ertzaintza en el caso de las tres del País Vasco, colocada en una fiambrera con un temporizador para su activación. ETA únicamente anunció previamente, en una llamada al diario GARA, la explosión del último de los artefactos.