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La Comisión de Sanidad del Senado aprobó ayer las enmiendas del Grupo Popular al proyecto de Ley del Tabaco, entre ellas la de la financiación de los medicamentos para dejar el tabaco, y rechazó las de CIU, PNV, IU y BNG que abogaban por la creación de salas para fumadores en los centros de trabajo. La enmienda popular establece que el Ministerio de Sanidad debe adoptar las medidas normativas necesarias para incluir el consejo médico, el diagnóstico y el tratamiento de la dependencia del tabaco con «medicamentos o productos sanitarios de eficacia comprobada».

Otra enmienda, en la que hubo unanimidad, establece que se permitirá fumar en las estaciones y áreas de servicio cuando cuenten con restaurantes o bares con zonas para fumadores y en las áreas de descanso al aire libre. Todos los grupos, menos el PSOE y el PNV, aprobaron un régimen transitorio para que algunos eventos deportivos del motor dispongan de un periodo transitorio de un año desde la aprobación de la ley para prohibir la publicidad o patrocinio del tabaco.

La Comisión aprobó también una enmienda transaccional, en contra del PSOE, por la que se amplía de ocho a dieciocho meses el período de tiempo para que los establecimientos de hostelería habiliten zonas señalizadas y separadas para fumadores y no fumadores. Otra de las enmiendas aprobadas, también con el rechazo del grupo socialista, hace referencia a que en los establecimientos psiquiátricos o en otras situaciones sanitarias similares se podrán habilitar zonas para fumar.

El senador socialista Juan José Palacios calificó como positivo lo aprobado ayer en comisión, aunque se trata de un proyecto que deberá ser votado de nuevo en el Pleno de la Cámara Alta y después por el Pleno del Congreso. Palacios subrayó que esta es una ley de salud pública para evitar los 50.000 muertos que provoca el tabaco en España, dijo que el tabaco es el problema de salud más importante que hay y aludió al aumento del consumo entre mujeres y a que los adolescentes se inician en el hábito a los trece años.

Sobre la negativa de su grupo a financiar los medicamentos para la deshabituación del tabaco, insistió en que responden al «respeto» que su grupo tiene a la responsabilidad asistencial de las CCAA, y consideró que es el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el lugar donde se debe decidir si se financian estos tratamientos.