Los trabajadores de tierra de Iberia tomaron ayer tres pistas del aeropuerto de El Prat.

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EFE-BARCELONA
El aeropuerto de Barcelona vivió ayer una jornada de caos sin precedentes debido a una huelga ilegal del personal de servicios de tierra de Iberia que ha afectado a unos 100.000 usuarios y obligado a cancelar alrededor de 600 vuelos.

Después de once horas de bloqueo, hacia las 21.00 horas tres vuelos de la compañía Air Europa a Lanzarote, Ibiza y Palma de Mallorca, y uno de Lufthansa a Fráncfort (Alemania), fueron los primeros en despegar.

Las instalaciones de El Prat quedaron prácticamente bloqueadas a partir de las 09.00 horas, cuando se ha celebrado una asamblea del personal de servicios de tierra de Iberia que derivó en una huelga descontrolada y en la invasión de tres pistas de y de sus vías de acceso.

Esa situación provocó el desconcierto general en las terminales de pasajeros, donde el personal de facturación de la aerolínea desapareció, obligó a Iberia a cancelar todos sus vuelos programados con origen y destino a Barcelona hasta esta mañana a las 7.00 horas y afectó a casi todas las compañías que operan en El Prat, como EasyJet, que anunció que emprenderá acciones legales contra Iberia.

Previamente, hacia las 17.30 horas, entre 200 y 300 trabajadores del servicio de tierra de Iberia que bloqueaban las pistas de rodadura depusieron su actitud tras haber recibido la confirmación de que la compañía ha solicitado a AENA realizar en El Prat el servicio de asistencia en tierra de sus aviones, petición que AENA autorizó rápidamente. Esta concesión supondría el mantenimiento de la mayoría de los centenares de puestos de trabajo que peligran, después de que el ente público anunciase que Iberia había perdido la licencia de la asistencia en tierra durante los próximos siete años.