El presidente del PP, Mariano Rajoy, garantizó ayer que su partido gobernará desde el centro con «prudencia, sensatez y moderación» para «todos los españoles» y consideró que «urge ya acabar con la división, la frivolidad, la ineficacia y la incompetencia» de José Luis Rodríguez Zapatero.
Rajoy, acompañado por todos los dirigentes de su partido, afirmó que los españoles saben que el PP tiene un «proyecto de centro, reformista y liberal que se preocupa de los problemas reales de la gente» y unos candidatos «capaces» dispuestos a «dejarse la piel para atender los problemas».
Rajoy clausuró ayer en el Palacio de Congresos de Madrid la Convención de candidatos autonómicos de su partido, un acto con el que los populares arrancan la precampaña de las elecciones que se celebrarán el próximo mes de mayo.
El líder del PP aseguró que mayo será el momento para «dar empuje electoral» a la alternativa de su partido y para demostrar que tiene un proyecto «en sintonía con lo que piensa la mayor parte de los españoles sobre cómo se han gestionado los últimos tres años».
«Han calado muy bien a Zapatero, la riada de problemas que ha provocado con su peculiar estilo de gobernar se palpa a diario. Por eso hay tanta gente que mira hacia el PP y tenemos que estar a la altura de ese reto», afirmó el máximo dirigente del PP, quien aseguró que tienen la responsabilidad «de dar confianza a quienes viven la desilusión de haber apoyado» al actual jefe del Ejecutivo.
Tras acusar a los socialistas de llevar a cabo «políticas de ruptura y confrontación», resaltó que «nunca ha habido tanto radicalismo, tantas cosas absurdas, tanta división y tanta falta de respeto a los intereses generales de los españoles».
Rajoy señaló que España «ha perdido una legislatura para preparar el futuro» y auguró que Zapatero «va a dejar una España dividida como nunca y con un horizonte lleno de incertidumbres».
Para el líder del PP «ya no basta con ejercer la oposición, sino que hay que darle respuesta con soluciones e iniciativas a los problemas», unas soluciones que están recogidas, recordó, en las conclusiones de las cuatro conferencias del partido -inmigración, seguridad, modelo de Estado y política económica y social- que serán la base del programa electoral para los comicios generales de 2008.
La solución está también, continuó, en el Programa Marco del PP -que se presentará en Madrid el 24 de febrero- y en la «apuesta por el centrismo liberal que defiende el PP en toda España».
Dirigiéndose a los candidatos, Rajoy dijo que tienen la tarea de «renovar la confianza» de quienes votaron a este partido y de «ganaros la confianza» de los que no lo hicieron y les insto a trasladar que este proyecto es una «alternativa abierta a todos». En este sentido, llamó a los candidatos a «mirar por todos», a tener un «diálogo constante y directo» con los españoles y sus necesidades y a transmitirles que «hay salida a esta situación».
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