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OTR/EFE-SANA/MADRID
Más de diez sospechosos de estar directamente implicados en el atentado del lunes, que costó la vida a siete españoles y dos yemeníes, han sido ya identificados pero están huidos, según declaró el ministro del Interior, Rachad al Alimi.

En una comparecencia ante varios medios españoles, el ministro precisó que entre los «más de diez» identificados hay «varios extranjeros», y aseguró que ya se dispone de fotografías de todos.

Al Alimi desmintió las informaciones que ayer filtró una fuente policial sobre el arresto de once personas en Saná y Al Mareb -donde sucedió el atentado- porque «no queremos hacer arrestos al azar, sino capturar a quienes realmente hicieron aquello».

«No vamos a tardar mucho en dar con ellos», aseguró. Sin embargo, reconoció que hay fundadas sospechas de que cuatro de los 23 hombres que en febrero de 2006 se fugaron de una cárcel de alta seguridad -en uno de los fallos más estrepitosos de la seguridad yemení- están entre los buscados por su implicación en el atentado.

Por otra parte, y con la cooperación como intención, hasta Yemen se ha desplazado el Equipo Policial conjunto de Apoyo ante Grandes Ataques Terroristas. Esta delegación, establecida por el secretario de Estado de Defensa, está compuesta por siete personas de Guardia Civil y Policía Nacional. En total, se trata de dos expertos de la Comisaría General de Información, el jefe del Grupo de Terrorismo de la Comisaría General de la Policía Científica, un TEDAX, un especialista del Servicio de Criminalística, otro adscrito al Servicio de Información y un experto en explosivos.

El director general de la Policía, Joan Mesquida, confirmó ayer en declaraciones a Telecinco el envío del equipo citado, al tiempo que situó el ataque contra objetivos occidentales y no específicamente contra españoles. «El suicida o la suicida no sería capaz de situar a España en un mapa», agregó.

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Àngel Moratinos, afirmó ayer que el Ejecutivo que representa sigue muy «pendiente de la investigación que está llevando a cabo el Gobierno de Yemen». Moratinos explicó en el Congreso de los Diputados que en los constantes contactos establecidos entre las autoridades de ambos países se trasladan toda la información de la que cada uno dispone. Respecto al envío del equipo de la policía científica, el titular de Exteriores lo situó en el marco de la colaboración, «para llevar a cabo una investigación de cómo y por qué se produjo el atentado».

Mientras, la española María Asunción Vitorica, herida grave en el atentado del pasado lunes en Yemen, está «en coma profundo», e ignora que sus dos hermanas vinieron ayer desde España en un avión de la Fuerza Aérea para acompañarla y reconfortarla. «Está en coma profundo y ha tenido solo una ligera mejoría», dijo el doctor Yaqub Saleh, que estaba al cargo esta tarde en la UCI, donde está ingresada.

María Asunción ha permanecido inconsciente prácticamente desde el primer momento del atentado, y en ese tiempo ha sufrido dos «craneotomías», según explicó el médico. La segunda duró tres horas y media y consistió en retirarle pequeños restos de metralla aún alojados en el cerebro, detalló una anestesista que responde al nombre de Natacha y estuvo presente en la intervención quirúrgica.