El Gobierno vasco anunció ayer que «cumplirá la Ley» y acatará la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a colocar la bandera española en todas sus sedes, incluida la Academia de la Ertzaintza de Arkaute (Àlava) aunque en sus 25 años de historia nunca haya ondeado en su fachada la enseña nacional.
Pero si bien el Ejecutivo de Vitoria está dispuesto a acatar la decisión judicial y no enredar más con la bandera, el resto de partidos no parecen dispuestos a enterrar este asunto.
Así, mientras el PP expresa su satisfacción por la sentencia del Supremo, desde el PSE, el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, dice que no es momento de «abrir conflictos sobre banderas». Y, como no, la ilegalizada Batasuna no ha dejado pasar la oportunidad de mostrar su malestar y criticar una decisión que «niega al pueblo vasco».
El fallo que el martes emitió el Supremo afirmaba que «la costumbre no puede prevalecer sobre la ley» y por tanto la bandera española debe estar colocada en todas las sedes oficiales del Gobierno vasco, incluso en la academia de la Ertzaintza donde nunca había estado presente.
Así, la resolución judicial rechaza el recurso de casación presentado por el Gobierno vasco y declara firme la sentencia dictada el 17 de octubre de 2003 por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), que aceptó la impugnación de la Abogacía del Estado contra «la negativa» del Ejecutivo autonómico a colocar la bandera española en la academia de la Ertzaintza. Una resolución que el Gobierno vasco ha asegurado que cumplirá, ya que su obligación es «cumplir la Ley» pese a que no esté de acuerdo con la misma.
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