El nuevo comunicado de ETA en el que la banda terrorista reivindicaba los cinco últimos atentados, incluido el del pasado 1 de diciembre en Francia en el que mató a dos guardias civiles y que calificó de «ejecución», ha despertado la misma reacción que aquel último crimen terrorista: el rechazo y la condena unánime de todas fuerzas políticas. El Gobierno, por boca del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó ayer que la única reacción a este nuevo comunicado serán nuevas detenciones de etarras, mientras que el PP apuesta por una «respuesta conjunta» de todos los partidos que incluya el compromiso de no negociación con la banda terrorista.
En su comunicado, que se difundió parcialmente en la tarde de ayer y que hoy publica íntegramente en 'Gara', ETA anuncia que «seguirá actuando contra todas las fuerzas y aparatos represivos españoles sea en el lugar que sea». Además, en el texto asume cinco acciones llevadas a cabo entre el 9 de setiembre y el 1 de diciembre, entre ellas la «ejecución de los miembros de los grupos especiales de la Guardia Civil Raúl Centeno y Fernando Trapero, en el curso de un enfrentamiento armado».
Cárcel
El ministro de Interior fue contundente a la hora de valorar el texto etarra y afirmó que la única respuesta será «detener a quien forma parte de esa organización, detener a quienes les apoyan, ponerles a disposición de los jueces, y que éstos los envíen a la cárcel». Desde el PP abogan por algo más que el trabajo policial para responder a la banda terrorista. El líder popular, Mariano Rajoy señaló desde Uruguay que ETA ha anunciado «lo que todos sabemos, que va a seguir intentando matar» y la respuesta ante esto «tiene que ser muy serena, pero a la vez muy firme» y debe incluir el compromiso de «no negociar» con la banda terrorista, la apertura del proceso de ilegalización de Acción Nacionalista Vasca (ANV) y el respaldo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para que «detengan a los terroristas».
El rechazo frontal al nuevo comunicado etarra también llegó por parte del Gobierno vasco. Su portavoz, Miren Azkarate, calificó el texto como una «vileza más» y aclaró a la banda terrorista que en Capbretón «no ejecutó a nadie» sino que «asesinó a dos jóvenes» con «perversa frialdad». Una vez más, la portavoz del Gobierno vasco recordó que el «ciclo de ETA, de la violencia, ya se ha acabado» y ahora es «la hora de la democracia, la hora de hacer política».
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