La carretera de Burgos (A-1), en Madrid, sufrió importantes cortes y retenciones a lo largo de toda la jornada de ayer. Foto: JAVIER LIZÓN/EFE

TW
0

OTR/PRESS-MADRID

Los consumidores mantienen la respiración. La falta de suministros en gasolineras y mercados podría notarse a partir de mañana. Ayer, la presencia de piquetes en la frontera con Francia y en los principales mercados mayoristas del país provocaronretenciones kilométricas en numerosas carreteras nacionales.

Desde primera hora de la mañana de ayer la huelga ya se notaba en las carreteras españolas. Las retenciones fueron importantes en las vías de acceso a Madrid, Valencia, Barcelona o Bilbao, con carreteras colapsadas por decenas de camiones que circulan a baja velocidad y que bloqueaban carriles o centros de distribución.

La huelga, convocada por la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (Fenadismer), cuenta con el apoyo de otros sectores económicos perjudicados, como el pesquero. Por ello, comerciantes y gasolineras han hecho acopio de todos los suministros que han podido para aguantar unas protestas que previsiblemente serán «largas y duras».

Para que la huelga no afecte a los ciudadanos, durante esta semana los transportistas han repartido más suministros «de lo habitual» en los centros de distribución y puntos de venta. Sin embargo, los posibles efectos podrán apreciarse a partir de mañana, sobre todo en productos como la carne, los lácteos, las frutas y verduras. Por no mencionar las gasolineras.

Durante la tarde de ayer fueron varias las gasolineras obligadas a cerrar tras quedarse sin combustible.

Pero no sólo las gasolineras fueron las que comenzaron a sufrir las consecuencias del paro, ya que también paralizó dos cárnicas en Lleida. Además, la huelga obliga a acelerar la recogida de melocotón y nectarina para llegar a las grandes superficies.

La convocatoria ha dividido a los camioneros. No cuenta con el apoyo de la primera organización empresarial del ramo, la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), pero sí con Fenadismer, la segunda patronal.

En la mañana de ayer la M-40 registraba por la mañana hasta 20 kilómetros de tráfico lento y retenciones en los alrededores de Mercamadrid, donde agentes de la Policía Nacional tuvieron que disolver un grupo de piquetes que cortaban la entrada al mercado de abastos. Además se registraron retenciones en la A1 y la A6. En el País Vasco, en la frontera con Francia, los piquetes bloquearon el paso a los camiones, y los que intentaban continuar su camino eran agredidos con piedras. Las retenciones iban desde la frontera con Francia hasta el peaje de Irún.

Mientras, en Catalunya los piquetes impidieron el paso de camiones en la frontera de La Jonquera y en el peaje de La Roca del Vallès, lo que ha provocado retenciones kilométricas en ambas zonas. Además, en los alrededores de ambos peajes se acumularon centenares de camiones que se encontraban bloqueados.