04/07/08 0:00
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OTR/EFE-MADRID En su 37 Congreso Federal, que comienza hoy, el PSOE aprobará una enmienda para que los inmigrantes legales puedan votar en las próximas elecciones municipales de 2011. Otra de las enmiendas polémicas es la de posibilidad la eutanasia. Con la primera iniciativa los socialistas entienden que se podría dar un paso más en la integración de los ciudadanos extranjeros en España y por ello, intentarán recabar los apoyos del resto de partidos para intentar sacarla adelante. Pero el PP ya ha expresado sus reticencias puesto que, a su juicio, derecho a ejercer el voto no es demasiado «prioritario» en estos momentos para la comunidad inmigrante. Así lo manifestó la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal, que señaló que lo primero ha de ser el otorgar dignidad a los inmigrantes a través del «derecho al trabajo».

El PSOE tiene «la voluntad inequívoca de hacer posible, en los términos previstos por la Constitución, el derecho a que los inmigrantes puedan votar en las elecciones municipales». Así lo explicó ayer el secretario de organización del partido, José Blanco, que recalcó que el hecho de que los inmigrantes legales residentes en el país puedan participar en la elección de los dirigentes de la autonomía en la que residen no sólo es algo «positivo para España» sino también para su propia integración. De poder hacerse efectiva, la iniciativa ampliaría los derechos de 1'3 millones de inmigrantes legales, que podrían votar en 2011. El PSOE debatirá una enmienda de adición sobre el derecho a una muerte digna, pero, más allá, anima a que la sociedad abra en el futuro el debate sobre la regulación legal de la eutanasia. Algunas de las alegaciones recibidas a la ponencia marco que los socialistas debatirán en su cónclave hacen referencia a la eutanasia, pero el PSOE ha consensuado finalmente una enmienda de adición, en la que habla sobre todo del derecho de las personas a morir dignamente y a recibir cuidados paliativos si es necesario.

Además, el PSOE estudia la posibilidad de presentar en el congreso que celebrará este fin de semana una resolución o enmienda que «ponga en valor el modelo lingüístico de la Constitución», en el que, además del castellano, se defiende el uso de las lenguas cooficiales. Según fuentes socialistas, se trataría de una respuesta al manifiesto en favor del castellano como «idioma común» que promueve un grupo de intelectuales y que ha avalado el líder del PP, Mariano Rajoy.

El 37 congreso incluirá entre sus debates el de la energía nuclear y en el dictámen de la ponencia finalmente irá un texto en el que se mantiene el compromiso de cierre de nucleares al final de la vida útil de estas y una apuesta por las energías renovables.