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OTR/PRESS-VALENCIA El secretario general del PP y portavoz del grupo popular en las Corts Valencianes, Ricardo Costa, aseguró ayer que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, es el «responsable de un complot de Estado» contra el PP y sus dirigentes.

En este sentido, apuntó que «más que un complot es una conspiración utilizando los resortes del Estado». Del mismo modo, Costa incidió en que el Supremo no tiene que decidir sobre él o sobre Francisco Camps, presidente de la Generalitat, sino «sobre un recurso de la Fiscalía y el PSOE» regional.

El síndic popular aludió de esta manera a las actuaciones que la Fiscalía General del Estado ha llevado a cabo en relación al 'caso Gürtel' "en el que el propio Costa estuvo imputado", y al de Palma Arena; así como a las «instrucciones» de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, para que se recurra el sobreseimiento de la instrucción de la rama valenciana del 'caso Gürtel'.

Costa se mostró preocupado porque «vivimos en una época de clara persecución política». Una afirmación que realizó basándose, dijo, en «hechos empíricos».

El secretario de acción Electoral del PSOE de Valencia, Víctor Sahuquillo, exigió ayer a Costa que «rectifique» sus acusaciones contra el Gobierno y le instó a explicar la relación de su partido con trama Gürtel. «Costa debe serenarse y explicar a los ciudadanos qué tipo de relación ha mantenido el Consell con personajes como 'El Bigotes'», manifestó.

Sahuquillo se expresó en estos términos en un comunicado en respuesta a las declaraciones realizadas por Costa.
Al respecto, el dirigente socialista recordó al secretario general del PP valenciano que su partido «no tiene un problema con el Gobierno de España, ni con los socialistas, sino con la Justicia, que investiga los presuntos casos de corrupción en los que estarían implicados algunos dirigentes populares». En consecuencia, exigió al secretario general del PP valenciano que «rectifique» sus acusaciones contra el presidente del Gobierno y manifestó que si los populares «hubieran elegido mejor a sus amistades y el presidente del PP, Mariano Rajoy, hubiera sido capaz de poner orden en el seno del partido, no se encontrarían en esta situación».

Sahuquillo acusó a los populares valencianos de «perseguir el deterioro de las instituciones para ocultar que algunos de sus dirigentes han aceptado trajes y regalos de una trama corrupta que está siendo investigada por la Justicia».