Don Juan Carlos en su discurso tradicional de Navidad.

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El Rey solicitó que los españoles se unan para superar tensiones y divisiones sobre la base de los principios que inspiraron la Constitución, para reforzar la cohesión interna y la proyección exterior de España y para que la economía vuelva a crecer y a crear empleo cuanto antes, de forma sostenible. En el discurso no se mencionó al Gobierno ni al PP, pero se intuía a quién iba dirigido el mensaje.

Estas son las tres tareas fundamentales para las que el jefe del Estado pidió el consenso de los españoles en su alocución de Nochebuena, pocos días antes de que España asuma por cuarta vez la presidencia de la UE, en un momento en que la Unión debe adoptar «medidas de vital importancia para su futuro» y «resulta prioritario lograr una Europa más unida, dinámica y presente en el mundo».

La bandera de la Unión Europea acompañó este año a la enseña nacional en la emisión televisiva del mensaje navideño de Don Juan Carlos, para la que el tradicional fondo del tapiz del salón de audiencias de la Zarzuela fue sustituido por la vista de los jardines del palacio que se contempla a través de los cristales de la sala. En sus palabras para todos los españoles, el Rey les solicitó que, juntos, acometan «tres tareas fundamentales», la primera de ellas superar tensiones y divisiones «sobre la base de los principios y valores» que alimentan «lo mejor de la convivencia» entre los ciudadanos de este país e inspiran la Constitución.

En segundo lugar, el Monarca animó a «sumar voluntades en torno a los grandes temas de Estado», reforzando la cohesión interna y la proyección exterior de España, y, finalmente, llamó a «redoblar esfuerzos» para que el país «vuelva a crecer y a crear empleo; cuanto antes y de forma sostenible». Tras recordar que el mundo se enfrenta a desafíos «que van desde la lacra del terrorismo, la crisis económica o el cambio climático hasta las pandemias o el narcotráfico» y «todos ellos requieren de la acción conjunta de los Estados», don Juan Carlos señaló que «el futuro impone decisiones estratégicas de gran calado, tanto a nivel interno como a escala europea e internacional».

Para afrontar estos retos, se precisa «una España sólida y cohesionada», añadió el Monarca, quien reclamó «tesón y fortaleza» y puso el énfasis en que la mayor fortaleza que necesita el país en el plano económico y social requiere «el más amplio entendimiento y solidaridad» entre los españoles y entre todas las comunidades autónomas. El Rey solicitó que los españoles se unan para superar tensiones y divisiones sobre la base de los principios que inspiraron la Constitución, para reforzar la cohesión interna y la proyección exterior de España y para que la economía vuelva a crecer y a crear empleo cuanto antes, de forma sostenible. En el discurso no se mencionó al Gobierno ni al PP, pero se intuía a quién iba dirigido el mensaje.

Estas son las tres tareas fundamentales para las que el jefe del Estado pidió el consenso de los españoles en su alocución de Nochebuena, pocos días antes de que España asuma por cuarta vez la presidencia de la UE, en un momento en que la Unión debe adoptar «medidas de vital importancia para su futuro» y «resulta prioritario lograr una Europa más unida, dinámica y presente en el mundo».

La bandera de la Unión Europea acompañó este año a la enseña nacional en la emisión televisiva del mensaje navideño de Don Juan Carlos, para la que el tradicional fondo del tapiz del salón de audiencias de la Zarzuela fue sustituido por la vista de los jardines del palacio que se contempla a través de los cristales de la sala. En sus palabras para todos los españoles, el Rey les solicitó que, juntos, acometan «tres tareas fundamentales», la primera de ellas superar tensiones y divisiones «sobre la base de los principios y valores» que alimentan «lo mejor de la convivencia» entre los ciudadanos de este país e inspiran la Constitución.

En segundo lugar, el Monarca animó a «sumar voluntades en torno a los grandes temas de Estado», reforzando la cohesión interna y la proyección exterior de España, y, finalmente, llamó a «redoblar esfuerzos» para que el país «vuelva a crecer y a crear empleo; cuanto antes y de forma sostenible». Tras recordar que el mundo se enfrenta a desafíos «que van desde la lacra del terrorismo, la crisis económica o el cambio climático hasta las pandemias o el narcotráfico» y «todos ellos requieren de la acción conjunta de los Estados», don Juan Carlos señaló que «el futuro impone decisiones estratégicas de gran calado, tanto a nivel interno como a escala europea e internacional».

Para afrontar estos retos, se precisa «una España sólida y cohesionada», añadió el Monarca, quien reclamó «tesón y fortaleza» y puso el énfasis en que la mayor fortaleza que necesita el país en el plano económico y social requiere «el más amplio entendimiento y solidaridad» entre los españoles y entre todas las comunidades autónomas.