El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, contestó ayer al líder del PP, Mariano Rajoy, y solicitó que diga «algo útil» a la ciudadanía española, en lugar de proponer un cambio de la Constitución Española para acabar con la crisis en un «plis-plas». «Sin embargo, de pronto ven la panacea y piden una reforma de la Constitución, convencidos de que es fácil modificarla y de que en un 'plis-plas' la crisis será solucionada», recalcó el titular de Interior, refiriéndose al Partido Popular.
Rubalcaba responde a Rajoy que cambiar la Constitución no es la solución a la crisis
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3 comentarios
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Rubalcaba tiene toda la razón del mundo estelar (ahora recuerdo a la "Pagín": el que tiene que cambiar es él, pero no sé como, pues tiene el cerebro tan deteriorado (no entiende los mensajes), que si no es mediante un trasplante del animal, que no quiero ni nombrar... Que desgracia de España.
Rubalcaba no ha estado muy fino porque, vamos a ver, dice la Carta Magna que todo español tiene derecho a un puesto de trabajo, a vivir decentemente en una vivienda, de alquiler o en propiedad y, para abreviar (MEMORIZO), parece ser que sigue en vigor la Ley Sálica, por lo cual Leonor y Sofía no podrán ser nunca reinas de España. Te lo dedico, ponle la voz de Sabina, vamos a contar mentiras, por el mar corre la liebre por el monte la sardina...RECUERDA: TODO ESPAÑOL TIENE DERECHO A UN PUESTO DE TRABAJO. ¿QUIÉN MIENTE?
Si las administraciones (todas) se pasan por el arco del triunfo la Ley de Estabilidad Presupuestaria, no está mal pensado que se modifique la constitución en el sentido de marcar los máximos de endeudamiento de las administraciones. Otra solución sería hacer una campaña destinada a los políticos para que de una vez por todas dejen de pensar que el dinero público no es de nadie. Los responsables institucionales de las tesorerias, deberían responder en un porcentaje con sus sueldos del incumplimiento de la ley de haciendas locales. Endeudar a pequeños municipios con el doble de sus presupuestos tendría que estar penado. A lo mejor así se pondrían las pilas los muchachotes, tan festeros ellos, tan generosos y espléndidos con dinero que no es suyo. Imagino que piensan que el que venga detrás que arree.