Con la entrada del Gobierno como accionista, la entidad dirigida por Adolf Todó podrá cumplir con la nueva normativa financiera española, ya que elevará su capital principal al 10,4%, por encima del 10% que le exige el Banco de España.
Estrategia
Esta estrategia de capitalización incluye estudiar «de forma inmediata» alternativas para atraer a inversores privados que sustituyan al FROB a medio plazo.
CatalunyaCaixa descarta salir a Bolsa en los próximos 12 meses, ya que lo considera «poco adecuado en el actual contexto de fuerte penalización de la valoración de las entidades financieras», pero fuentes de la entidad explicaron que esta opción se mantiene como alternativa de futuro a más largo plazo.
Por ahora, contempla fórmulas de capitalización privada como dar entrada a los empleados en el capital, emitir deuda convertible en acciones entre clientes y combinar negocios con otras entidades financieras. Asimismo, no descarta estructuras que faciliten la segregación de los activos inmobiliarios.
En todo caso, este acuerdo del consejo de administración define líneas básicas de posibilidades de futuro que CatalunyaCaixa irá concretando una vez sean analizadas por el Banco de España, y que prevé añadir a «los buenos resultados derivados de las prácticas comerciales y al control de costes» conseguidos tras la fusión entre Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa.
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