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La mayor parte de los grupos parlamentarios han criticado la inconcreción de las medidas que el futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado en su discurso de investidura que, para el PSOE, «ha sido ambiguo y decepcionante».

Amaiur ha sido el único partido representado en el Congreso de los Diputados que no ha valorado una intervención que, para varios dirigentes del PP -Alberto Ruiz Gallardón, Miguel Arias Cañete y Javier Arenas- ha mostrado la «enorme responsabilidad» de Rajoy en su discurso de investidura.

El portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, ha reprochado a Rajoy que no haya concretado qué medidas va a adoptar para estimular la economía y crear empleo y que no se haya comprometido claramente con los servicios públicos esenciales.

Es la misma crítica que ha hecho el portavoz de CiU, Josep Antoni Durán Lleida, para quien Rajoy «se ha callado las medidas duras». Duran ha expresado además su preocupación por lo que considera una «tónica de recentralización» en el discurso de Rajoy.

El diputado de IU José Luis Centella ha criticado un discurso «de derechas» con el que, a su juicio, Rajoy ha querido contentar a los mercados y que va en línea «de menos derechos sociales y más recortes laborales, por lo que ha anunciado el voto en contra de IU e ICV a la investidura.

La portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha definido la intervención de Rajoy como un discurso «de nacionalismo económico» y ha criticado que no haya dedicado «ni una reflexión» a la «crisis política» que, a su juicio, provoca el modelo de Estado, y que «lastra la recuperación» económica.

Díez ha denunciado asimismo que el presidente del PP no haya concretado su programa de gobierno. «La concreción de la gran reforma que necesita España se llama que hay que eliminar los puentes», ha afirmado la portavoz de UPyD.

«Si eso es llamar al pan, pan y al vino, vino», el pan «es de molde y el vino tiene agua», por lo que no es ni pan, ni vino, ha continuado.

A una posible «recentralización» de las competencias autonómicas se ha referido el portavoz del PNV, Josu Erkoreka, quien ha criticado que las únicas concreciones de Rajoy hayan sido sobre materias en las que «están en juego abiertamente» estas competencias.

Erkoreka ha expresado además su sorpresa por que Rajoy no haya profundizado en el proceso abierto tras el cese definitivo de la violencia de ETA.

El portavoz de ERC, Alfred Bosch, votará en contra de la investidura de Rajoy y considera que su partido y Cataluña tienen «más argumentos para salir de esta España» después de escuchar las propuestas centralistas y de recortes que ha planteado.

La representante de Coalición Canaria, Ana Oramas, ha tachado el discurso de «buenismo» y ha considerado que Rajoy «debería haber dicho a los españoles dónde hará los recortes», antes de condicionar su apoyo a los compromisos que Rajoy asuma con Canarias.

Los dos diputados del BNG votarán en contra de la investidura, según ha anunciado Francisco Jorquera, para quien la intervención ha estado «cargada de eufemismos» porque, si se «lee entre líneas», Rajoy ha anunciado un «programa duro de recortes».

También se ha posicionado en contra de la investidura la portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, quien cree que «el PP pretende utilizar esta crisis como coartada para un proceso de recentralización», no se sabe de qué «dimensión y profundidad».

El diputado de Foro de Ciudadanos, Enrique Álvarez Sostres, ha anunciado que votará a favor de la investidura de Rajoy y ha alabado la defensa que ha hecho el líder del PP de la simetría del Estado o que de la crisis se sale «apoyándonos mutuamente» y no unas autonomías a costa de otras.

También apoyará a Rajoy el portavoz de UPN, Carlos Salvador, quien cree que el discurso ha sido «positivo, coherente y previsible», tanto en el diagnóstico como en las medidas.

Por último, el diputado de Equo-Compromís, Joan Baldoví, ha calificado de «muy rancio» y de «muy centralizador» el discurso con el que, ha dicho, Rajoy ha intentado «contentar más a los bancos y a los mercados que a las personas».