Los incidetnes se produjeron al cortar el tráfico los estudiantes. | Kai foersterling

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Seis detenidos y nueve heridos, cinco de ellos agentes de Policía, es el balance de la tercera jornada consecutiva de protestas estudiantiles que se llevaron a cabo en Valencia a raíz del arresto de un joven de 17 años durante una manifestación en contra de los recortes en Educación. La detención de este menor, que se produjo el pasado miércoles frente al instituto Lluís Vives de Valencia, ha desencadenado una ola de concentraciones e incidentes entre jóvenes y policías que ha dado lugar a un total de dieciséis detenidos.

Los diez que fueron arrestados el jueves han sido puestos en libertad. Ester Sanz, una de las dos jóvenes que fueron liberadas tras pasar por comisaría, ha relatado a los periodistas que la Policía actuó de forma «muy agresiva», dando «patadas y empujones a niños de 14 años».

La jornada de ayer ha comenzó con un corte del tráfico en las calles Marqués de Sotelo y Xátiva -frente al Instituto Lluís Vives- por parte de un grupo de estudiantes apoyado por padres, profesores y dirigentes políticos. Los manifestantes decidieron trasladarse posteriormente hasta la comisaría de Zapadores, donde se encontraban los detenidos del jueves, pero los agentes les impidieron avanzar, generando así los primeros momentos de tensión.

Tráfico

Finalmente lograron emprender la marcha interrumpiendo el tráfico en varias calles y volcando contenedores de basura a su paso, custodiados en todo momento por un fuerte dispositivo policial. Ya en la comisaría, los manifestantes protagonizaron una sentada de media hora exigiendo la libertad de los detenidos, y después intentaron dirigirse a la Ciudad de la Justicia, pero la Policía les cerró para impedirlo y procedió a identificar oficialmente a quienes habían cortado el tráfico durante la protesta.

Fuentes policiales explicaron que todas estos jóvenes fueron identificados para informar a la Delegación del Gobierno, que podría imponerles una sanción. Carmelo Lozano, el padre de una menor de 17 años que fue identificada, explicó que los policías han pedido los datos «para formalizar una propuesta de sanción por reunión ilegal, por no notificar a la Delegación del Gobierno».