El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras su intervención en una jornada temática del partido sobre igualdad. | Efe

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El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha propuesto reformar la Constitución para consagrar la igualdad entre hombres y mujeres, y tratar así de que los retrocesos en este sentido sean los menos posibles cuando llega la derecha al poder.

«La derecha en esto de la igualdad no está en el siglo XIX, sino en el XVIII», ha criticado Pérez Rubalcaba en Sevilla durante su intervención en una jornada temática del PSOE sobre igualdad, la quinta previa a su conferencia política de otoño.

Ha propuesto que se reflexione sobre una reforma de la Constitución «que consagre estos temas de igualdad para que no haya retrocesos» en la igualdad entre hombres y mujeres.

Ha añadido que hay que estudiar qué aspectos cambiar «para que los retrocesos, que se van a seguir produciendo, sean los menos posibles cuando llega la derecha al poder, que es una derecha poco liberal», por lo que ha apostado por «abrir» la Constitución para recoger esa igualdad.

Pérez Rubalcaba ha destacado la «capacidad de las leyes para cambiar las cosas» porque a veces se hacen esas normas y se piensa «que nunca vamos a retroceder», pero ahora con las políticas actuales cree necesario una adaptación «a los nuevos tiempos».

Ha añadido que sería el «dique más formidable» para las políticas de igualdad, que se llevarían «a lo más alto» al consagrarlas en la «mayor ley, en la más capaz y en la más potente».

El secretario general del PSOE ha explicado que no se trata de abrir la Constitución ilimitadamente, sino hacerlo «con moderación» dentro de la «reflexión» que defiende su partido, sin que se trate de un proceso constituyente.

Ha calificado de «profundamente tóxica» la desigualdad que existe en España entre hombres y mujeres porque «está en lo peor de nuestra cultura», y ha denunciado que la derecha española pretende dar el mensaje a las mujeres de que tienen que olvidarse de lo que han conseguido.

Ha dicho que se les pretende trasladar el mensaje de que «no hay dinero y tenéis que volver a hacer lo que siempre hicísteis y nunca quisimos que dejárais de hacer», refiriéndose a las mujeres.

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Ha «echado en cara» al Gobierno y al presidente, Mariano Rajoy, que en año y medio al frente del Ejecutivo central «no haya hecho una sola reflexión pública sobre la violencia contra las mujeres».

Por ello, ha aceptado el reto de «hablar de la herencia recibida» porque se siente «orgulloso» de lo conseguido por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en materia de igualdad, medidas entre las que se encuentra que en cada cuartel de la Guardia Civil o Policía Nacional hubiera un grupo especializado en las mujeres maltratadas.

«Ese mensaje se está empezando a perder», ha añadido Rubalcaba, quien ha indicado que están bajando las denuncias porque «está reapareciendo el miedo», por lo que considera que deben ser «contundentes» y decirles que están con ellas.

Ha tachado de «gigantesco disparate» y de «inmoralidad» achacar a la crisis la pérdida de derechos de las mujeres y ha apostado, «en tanto» se aborda la reforma de la Constitución, que se centren también en apuesta de las listas cremallera, «que es tanto como decir que garantizamos la paridad en las instituciones».

En ese sentido, ha dicho que «ojalá» todos los partidos lo hicieran y ha manifestado que es algo que debería incluirse en la ley de partidos, aunque mientras se hace o no el PSOE lo incluirá en todas sus listas.

El líder de la oposición, ha reafirmado la igualdad como motor de las políticas socialistas y ha asegurado que respecto al PP «en lo que menos somos iguales es justamente en la igualdad».

Ha apostado por traducir sus propuestas en ese aspecto a la acción política cotidiana del partido «para que comprueben que no somos iguales», ya que la desigualdad de las mujeres «es la más lacerante» de las que existen en España.

Ha señalado que el PSOE tiene que «predicar con el ejemplo» y crear un proyecto que no se limite solo «a arreglar los destrozos del PP» y ha opinado que el partido no puede acabar estas jornadas «con un discurso estrictamente defensivo» de lo que han hecho, sino que deben ir a la conferencia de otoño «con un proyecto ofensivo, para ir más allá».

Ha animado a los socialistas a hacer un proyecto con propuestas concretas «para volver a gobernar en España», y para ello la lucha contra la desigualdad de las mujeres «tiene que seguir en el corazón» de sus ideas.

El líder socialista también ha respaldado la política de José Antonio Griñán al frente de la Junta de Andalucía, de la que ha dicho que los socialistas del resto de España se sienten «orgullosos» con medidas como el decreto de la vivienda o contra la exclusión social.