Artur Mas se abraza a Jordi Pujol antes de iniciar la reunión de la ejecutiva de CDC. | ALBERTO EST

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Veinticuatro horas después del acuerdo de los partidos favorables a la consulta catalana ha comenzado a ponerse en marcha la maquinaria con el registro por parte de CiU, ERC, ICV y la CUP de la petición para que el Gobierno ceda la competencia de referéndums. Mientras, Convergència i Unió han admitido que las elecciones en clave plebiscitaria serán la alternativa a la consulta si ésta no se puede celebrar de ninguna manera por los impedimentos del Gobierno.

El líder de UDC, Josep Antoni Duran, ha reiterado que «la consulta será legal o no será» y ha añadido que dentro de la legalidad también está la posibilidad de convocar unas elecciones plebiscitarias si el Estado recurre al Tribunal Constitucional (TC) o rechaza cualquier vía para hacerla, como la ley de consultas en el Parlament.

Ha explicado también que su partido y CDC deberán abrir un «debate interno» para aclarar su posicionamiento alrededor de la pregunta una vez se convoque la consulta, y que ahora debe imponerse el diálogo con el Estado para que sea posible. Ha señalado que de momento Unió no ha decidido si pedirá el voto para el doble «sí», al que ya ha decido CDC.

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha criticado «la intolerancia y la poca convicción democrática» de los que han respondido al acuerdo sobre la fecha y la pregunta de la consulta remitiéndose a las leyes para negar su posible celebración.

Intolerancia

«Cuando esta expresión normal se quiere negar simplemente con argumentos jurídicos, eso tiene que ver con la intolerancia y con una poca convicción democrática», ha dicho.

Mientras, CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP, los cuatro grupos que pactaron el jueves fecha y preguntas de la consulta, han presentado en el registro del Parlament una petición al Congreso para que sea el Govern y no el Estado quien pueda convocar en 2014 un «referéndum consultivo». Ahora esta solicitud inicia su tramitación en el Parlament, aunque este debate aún no se abordará no en el pleno de la Cámara catalana de la semana que viene, sino más adelante: ya en 2014.