Después de dos días de debates entre el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y la oposición, el pleno de la Cámara Baja ha evitado, por 160 votos a favor y 184 en contra, la devolución de un proyecto que ahora inicia el trámite de enmiendas parciales.
Todos los grupos parlamentarios, salvo PP y UPN, habían presentado enmiendas a la totalidad por entender que los presupuestos se basan en una proyección errónea y falsa de la recuperación económica que no ha llegado a la inmensa mayoría de los ciudadanos.
Sin embargo, en su discurso final, Montoro ha asegurado que los presupuestos del año que viene son los que necesita el país para «completar el camino» y reforzar el crecimiento económico y la creación de empleo «tras tres años de durísima travesía en el desierto».
El ministro se ha dirigido a los españoles que más han sufrido la crisis económica y a los que han perdido la fe en la política para pedirles que «confíen en España», ya que con las medidas que está adoptando el Gobierno, los episodios que se han vivido en el pasado reciente «no se volverán a repetir».
«España se dispone con todo merecimiento a ganar un nuevo futuro de prosperidad», ha recalcado el titular de Hacienda, para quien «todo ha sido útil, también lo más difícil».
Ahora «una España unida» -expresión que ha repetido Montoro en varias ocasiones tras las reivindicaciones independentistas de distintas formaciones de la Cámara- debe situarse «en la línea de salida hacia un futuro mejor y de creación de empleo» y ayudar también a «despejar el camino» de Europa.
En el futuro, ha defendido, se debe «luchar contra uno de los aspectos más negativos de esta crisis: las desigualdades», que son «intolerables e impropias de una sociedad desarrollada», y fomentar que «nuestros hijos disfruten de una igualdad de oportunidades, con independencia de su origen social».
«Estos presupuestos no son los de los grandes números, sino los de todos y cada uno de las personas a los que van dirigidos», ha dicho Montoro, que no obstante ha recalcado que estas cuentas están «llamadas a dotar e impulsar el dinamismo de la economía» a través también de medidas como la reforma fiscal.
A partir de ahora y hasta el viernes se abre el plazo de enmiendas parciales, trámite en el que el ministro ha deseado un mayor compromiso por parte de los grupos y ha garantizado una «posición constructiva» por parte del Gobierno.
Montoro ha encontrado durante el debate que las posturas más cercanas a sus planteamientos provenían de los grupos nacionalistas de CiU y PNV.
A su juicio, la presentación de doce enmiendas de devolución a su proyecto se puede entender como una «posición política» que «se entiende» porque el PP tiene mayoría absoluta.
Durante el debate de hoy, Montoro ha dicho hoy que si el Gobierno «lo estuviera haciendo tan mal» como pretendían las enmiendas a la totalidad «no estaríamos creciendo», y ha explicado que la necesidad de reducir el déficit «no es dogmática» sino «lo que más nos conviene».
También ha subrayado que a la mayoría de los partidos integrados en el grupo mixto «no les conviene políticamente que haya recuperación económica en España», algo que sin embargo «es una realidad», ha dicho.
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