El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, a su llegada este viernes a un acto público en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Valencia, en el que ha reivindicado a esta formación como "el movimiento heredero" del 15M. | Efe
València15/05/15 0:00
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesia, ha reivindicado a esta formación como «el movimiento heredero» del 15M, del que este viernes se cumplen cuatro años, pues éste fue «la mejor expresión social de esas crisis del régimen político español», y Podemos fue «la mejor expresión política».
30 comentarios
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Pués que quieren que les diga, ideologías a parte. Cuando comparas la capacidad dialéctica e intelectual de Pablo Iglesias con sus adversarios (Mariano Rajoy, Pedro Sanchez, Albert Rivera, etc...) creo sinceramente que no hay color, los supera ampliamente.
Un charlatan de feria vendedor de bragas + el discurso de mis venezuela ( yo quiero un mundo mejor y paz en la tierra...) en la gala de miss universo + un profesor de universidad con poco trabajo, buen sueldo y 3 meses de vacaciones + la mala hostia de la belen estaban = Pablo Iglesias
La karolina de abajo (con K), tómate una tila.
Creo que Podemos se equivoca radicalmente en su propuesta de cargar el peso del Irpf a los salarios de más de cincuenta mil euros. Lo que debería hacer es apostar para que esos sueldos sean más y no miserias como lo que hay en la actualidad gracias a políticas del PP. Creo que así se perderán muchos votos, votos de clase media desencantada con el sistema actual que confiaba en la opción de Podemos como alternativa a más de lo mismo.
Querrás decir que detrás la movilización del 15 M estaba algún profesor de la universidad complutense que en vez de trabajar seriamente se dedicaba a la demagogia. Bueno, aquellos que ingenuamente fueron movilizados, ahora saben que detrás de todo esto están los neocomunistas, esos populistas que nos quieren llevar al bienestar venezolano. Gran técnica de movilización, de crítica fácil pero sin aportar ninguna solución seria, es decir puro populismo y al final de todo, una dictadura a la venezolana. Que no me tomes el pelo un puro fraude, pero mortal para la democracia. Ya tuvimos bastante con un necio populista leones que nos llevo a la ruina.
Y eso ( el pablito) es lo que tenemos de catedratico?.............vaya modelo para los demas catedraticos de verdad..............
Todos los partidos políticos que han pasado por el gobierno español tras la muerte de Franco -UCD, PSOE y PP- han acallado y tratan de acallar las voces discrepantes utilizando como arma disuasoria y represora a la Constitución de 1978. Y lo han hecho esgrimiéndola como si de una obra maestra se tratara, de la que, por “perfecta”, ni una sola coma se debe cambiar. En realidad sí se ha cambiado alguna vez, un par de ellas concretamente -en 1992 para adecuar la estructura judicial española a la UE (art. 13.2), y en 2011 para fijar el techo de gasto (art. 135). Por supuesto que Juan Carlos de Borbón, el Jefe del Estado preparado e impuesto por Franco para dejar todo “atado y bien atado”, sigue gozando de privilegiada protección en el seno de la citada Carta Magna. La Constitución monárquica que tanto defienden los principales grupos políticos del Estado español es fruto de una “ruptura pactada” con el franquismo, y no de una “ruptura democrática” con éste, que es lo que se demandaba masivamente en la calle. Las estructuras del franquismo siguen intactas, de modo que la “Transición” que tanto nombran nunca ha existido. ¡Y aún tienen el cinismo de llamarla modélica! ¡Que no nos vengan con cuentos! Entre 1976 y 1980 la policía, la Guardia Civil y la extrema derecha asesinaron impunemente a más de cien personas, y miles de detenidos fueron salvajemente torturados. La población fue totalmente ninguneada, ya que la redacción del texto constitucional fue realizada a sus espaldas. Elaborado de forma casi clandestina, el primer conocimiento que tuvo la ciudadanía acerca del mismo fue a través de una filtración a la revista “Cuadernos para el diálogo”, que publicó el borrador y montó una buena bulla [1]. La autoría de la Carta Magna se le atribuye a Gabriel Cisneros, José Pedro Pérez Llorca y Miguel Herrero por la UCD -franquista-; Gregorio Peces Barba por un PSOE de ideología decadente, que renunció al marxismo -el 8 de abril de 1978- y se dedicó -y se dedica- a ocupar la mejor “posición” posible a base de lo que haga falta para conseguirlo; Manuel Fraga Iribarne por AP -ministro de Información y Turismo con Franco entre 1962 y 1969, y ministro de la Gobernación en 1976; responsable de numerosos asesinatos durante la ostentación de este último cargo-; Miguel Roca por CIU -de derechas-; y Jordi Solé Tura por un PCE que para poder acceder a la legalidad -el 9 de abril de 1977- hubo de claudicar y pasar a enarbolar en sus mítines la bandera de Franco y de los Borbones, reconocer oficialmente la unidad de España, firmar la Ley de la Reforma Política -18 de noviembre de 1976- y los Pactos de la Moncloa -25 de octubre de 1977-, que supuso un notable retroceso en las conquistas obreras conseguidas con mucho esfuerzo y dolor durante tantos años de lucha. Y todas esas inaceptables concesiones fueron realizadas, según Santiago Carrillo -secretario general, por aquel entonces-, “por el peligro que se cierne sobre la democracia”. Casi treinta años ha necesitado el PCE para por fin desvincularse oficialmente de la Constitución de 1978, argumentando el incumplimiento de todos los títulos y artículos de derechos sociales, económicos, ambientales, y el recorte de las libertades políticas. Estos siete “viriles” individuos fueron, pues, los que oficialmente frustraron la demandada ruptura democrática con el franquismo, y de aquella negación nació la Constitución que tan orgullosamente exhiben hoy los paladines de la “democracia española”. Estos “siete magníficos” son los padres de la “criatura” que, en los treinta y cinco años que ahora cumple, prácticamente nunca ha experimentado cambio de “peinado” ni de “vestido” porque, según pretenden hacernos creer, ya es lo suficientemente atractiva; y lo dicen a pesar de que su llegada al mundo fue de manera provisional. La Constitución no es ajena, tampoco, al parlamento surgido tras las elecciones nada democráticas del 15 de junio de 1977. Por otra parte, conviene recordar que el gobierno no permitió hacer campaña a los partidarios del no y de la abstención. La participación en el referéndum fue sólo del 66,96%, eso a nivel de todo el Estado, donde la mayoría votó “sí”. En la Comunidad Autónoma Vasca sólo el 30% de los censados votó a favor, y el otro 70% se decantó por el no y la abstención, que superó el 55%. Otro dato muy significativo es que, en 1978, la mayoría de edad estaba situada en los veintiún años, lo cual quiere decir que todos los que participaron en el referéndum ahora tienen más de 50 años; motivo más que suficiente para que el texto constitucional hubiese sido ya sometido a más de un posible cambio. Es curioso como las mismas personas que esgrimen la Constitución para negar demandas irrenunciables de amplios sectores de la sociedad -el derecho a la autodeterminación, por ejemplo-, hacen caso omiso a exigencias elementales registradas en la Carta Magna, como son el derecho al trabajo y a la vivienda digna -artículos 35 y 47 respectivamente. Cada 6 de diciembre, las “virtudes” de la Constitución española son resaltadas por los “demócratas de toda la vida” del Reino de España -tremenda paradoja: democracia y monarquía nunca podrán ir juntas cogidas de la mano-, pero lo cierto es que el grueso de la ninguneada población no tiene nada que celebrar en la citada fecha.
A este solo le importa la silla de Rajoy, lo otro le da asco, las municipales se la suda porque lo van a machacar. Es un ensimismado, un egolatra individualista. Esdo si fuera PPPSOE.
Que le quiten la nomina a este profe de la casta, ahora diputado.
Bla bla , bala, habla como un rapero sin gracia, mitins mas largos que los de cuba que no dicen nada, ademas monarquico que hace regalos, hay que ser tonto. Este tio es un aprovechado como el Riverita. Que aprovechados.