El rey Felipe VI recibió en audiencia al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, en el Palacio de la Zarzuela. | Ballesteros

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El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, defendió este miércoles ante el Rey la necesidad de convencer a los catalanes de que les convenía rechazar en las urnas la «locura» promovida por Artur Mas y desveló que don Felipe viera «irreconducible» la postura del presidente de la Generalitat.

Tras reunirse con don Felipe una hora y veinte minutos en el Palacio de la Zarzuela, Revilla afirmó asimismo que el Rey estuvo «muy preocupado por lo que está pasando en España» y aseguró que don Felipe y él habían «coincidido básicamente» en las causas que llevaron al afloramiento de nuevas fuerzas políticas durante una audiencia en la que ambos hablaron «de Podemos y Ciudadanos».

En declaraciones a los periodistas que le aguardaban ante la entrada al recinto de la Zarzuela, el presidente cántabro explicó que, al abordar la situación de Cataluña, el Rey le «ha dejado claro» que, a pesar de que se reunió en la Zarzuela con Mas el pasado viernes durante casi hora y media, «es irreconducible su postura».

«Con este señor Mas no hay arreglo posible y vamos derechos al precipicio», reflexionó Revilla, antes de reafirmar su tesis de que era preciso hacer «un poco de pedagogía» entre los catalanes para explicarles que no era bueno para ellos «este desafío» y que debían «responder contundentemente» en las urnas a esta «huida hacia adelante» que era «una locura» tanto para España como para Cataluña.

Revilla creyó que había que decirles a los catalanes que, «más allá de lo sentimental que puede resultar decir ‘Soy una nación, soy independiente, viva Cataluña'» había unas consecuencias tremendas para ellos.