El candidato a la presidencia del Gobierno por el PP, Mariano Rajoy, junto a la secretaria general, María Dolores de Cospedal. | Efe

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El líder del PP, Mariano Rajoy, ha cerrado este viernes la campaña electoral con su mensaje central de estos días, el de concentrar todo el voto moderado en su partido, subrayando que «la clave» para el domingo es «sumar» a todos los que piensan «igual».

Rajoy ha hecho así un último llamamiento a quienes en diciembre se quedaron en casa o abandonaron al PP para votar a Ciudadanos, para que esta vez vuelvan a apostar por los 'populares'.

Un mensaje que ha extendido a todos aquellos que se consideren moderados en España y que piensen «igual» aunque tengan discrepancias con el PP que, ha subrayado, son «superables».

«El gran tema es si en estas elecciones somos o no capaces de unir nuestros esfuerzos, porque al que une esfuerzos y suma, la ley electoral le ayuda, al que divide o resta la ley no le ayuda», ha insistido Rajoy.

Y ha recordado así, por última vez, que Unidos Podemos será segunda fuerza política -"lo peor que le puede pasar a España», ha dicho-, como también ha insistido en que Ciudadanos no obtuvo en diciembre ningún escaño en veinticinco provincias y eso provocó menos diputados para el PP en favor de Podemos o el PSOE.

«Lo que está en juego» el domingo hace que el PP pueda pedir «legítimamente» que los votantes apuesten por «la unidad», como han hecho «otros», porque la suma es garantía de más escaños y de que «habrá en España un gobierno que continuará por el buen camino y la buena dirección», ha señalado.

Además, en el mismo día en que se ha conocido que el Reino Unido ha votado irse de la UE, Rajoy se ha servido de esta noticia para subrayar que España necesita en este momento de Europa un gobierno con experiencia.

«Para gestionarlo bien, defender los intereses de los europeos y lo que quieren los españoles, se necesita un gobierno fuerte, con conocimientos, con solvencia y que haya demostrado con hechos tener capacidad de defender en Europa lo que le interesa a España», ha recalcado.

De ahí que haya insistido en que no es momento de «experimentos» ni «para hacer prácticas», sino para que «quien se lo sepa coja el toro por los cuernos y continúe una senda en la que no podemos volver atrás».

A su juicio, sería «tremendo» que tras el esfuerzo de los españoles, ahora llegaran al gobierno quienes dicen que lo hecho durante los últimos años no sirve para nada.

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«Este partido es heredero de la historia de España, no cree en los adanes y cree que lo bueno hay que mantenerlo porque sólo se cambia lo que no funciona», ha añadido Rajoy.

En un discurso en el que en todo momento ha puesto a Unidos Podemos como rival principal y casi no se ha acordado del PSOE, Rajoy ha señalado que la coalición encabezada por Iglesias la forman quienes «presumen de nuevos partidos pero son los viejos doctrinarios» de su etapa universitaria.

Ha lamentado así que gobiernen en ciudades como Madrid «gracias a la generosidad ingenua y ridícula del PSOE» o «liquiden» la educación concertada en Valencia, también con el apoyo de los socialistas.

Rajoy ha cerrado su último mitin admitiendo que a lo mejor a los 'populares' les han faltado dos días de campaña pero asegurando que tiene la sensación de que el domingo les va a ir «bien».

Y ha pedido a los suyos un último esfuerzo estos dos días, porque, como ha bromeado, en la jornada de reflexión no se puede pedir el voto pero sí hablar.

El líder del PP ha estado arropado en este acto por los ministros de su candidatura -Soraya Sáenz de Santamaría, Cristóbal Montoro e Isabel García Tejerina- así como por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuente, y la expresidenta del PP madrileño Esperanza Aguirre.

Cospedal ha recordado también el 'brexit' para advertir de que «hoy más que nunca España necesita un partido como el PP que defienda la integración en Europa».

Igualmente ha apelado al voto útil, al señalar que muchos votos a Ciudadanos «no han valido para nada» y admitir que «no puede volver a pasar» que muchos de los que antes apoyaban al PP se queden en casa como en diciembre.

Ha advertido además de la «encrucijada» a la que se enfrenta el país, que debe elegir entre «el voto moderado de la seguridad y la confianza» al PP o entre esos «viejos o nuevos comunistas» que «se llamen como se llamen» traerían al país «quiebra, miseria y paro».

Mientras, Cristina Cifuentes ha pedido el voto para el PP con el fin de garantizar el futuro de España y evitar que con Podemos en el Gobierno el país escriba «una de las páginas más negras de su historia».

Unas 6.000 personas -según el PP- han estado esta noche en el cierre de campaña de los 'populares', que ha comenzado tarde por el retraso de la llegada de Rajoy, procedente de Valencia, y en el que dirigentes del partido y simpatizantes se han divertido con la música del DJ El Pulpo e incluso han subido a «pinchar» con él.