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Las ocho asociaciones de la Guardia Civil han pedido este martes que los presupuestos del Estado de los tres próximos años destinen 1.500 millones (500 cada año) a equiparar sus salarios con los de los agentes autonómicos, y han advertido de que de no ser así las manifestaciones que ha habido hasta ahora serán «pequeñas».

Los máximos responsables de las ocho asociaciones representativas en el instituto armado (AUGC, AEGC, ASES-GC, Unión GC, UO, APROGC APC e IGC) han comparecido juntos en rueda de prensa para destacar su unidad de acción en lo referido a la equiparación salarial y exigir al ministro del Interior que concrete la partida que ha anunciado que destinará a este fin.

«Queremos concreción, que por parte del ministro haya un compromiso con números y plazos... no vaya a ser que luego nos hagan un Puigdemont», ha resumido ironizando el secretario general de Unión GC, Ramón Rodríguez Prendes, tras recordar que los guardias han sufrido constantes congelaciones de sueldo y hasta bajadas del 5 %.

El secretario general de AUGC, Alberto Moya, ha explicado que «ya no valen más pretextos» porque «la paciencia de las fuerzas y cuerpos de seguridad se ha terminado» tras «años de promesas de equiparación incumplidas», como se demostró en la multitudinaria manifestación celebrada el sábado en Madrid convocada por la plataforma Jusapol y apoyada por la mayoría de los colectivos de guardias.

Y ha asegurado que «ya no se va a parar hasta conseguirlo, y si las movilizaciones que ha habido hasta ahora no se atienden se van a quedar pequeñas con las que están por venir».

Moya ha relatado que la cuestión básica es la diferencia en el complemento específico que cobran los diferentes agentes, y que en teoría se calcula por parámetros como la dificultad técnica, el peligro o la penosidad el trabajo.

Un guardia civil cobra 650 euros al mes de complemento específico, un policía nacional 689 y un mosso d'Esquadra 1.525, una diferencia incomprensible para los representantes asociativos porque se trata de trabajos con las mismas características.

Los ciudadanos han sido conscientes de esta «injusta diferencia» al ver «la imagen de policías y guardias civiles humillados en Cataluña, echados de los hoteles, mientras que la Policía y la Guardia Civil han defendido la democracia», en palabras del presidente de ASES-GC, José Francisco Silva.

«Esa es la película que nosotros no hemos podido transmitir, y que ahora la gente ha visto», ha añadido tras asegurar que otro punto clave para lograr la equiparación ahora es que Ciudadanos «haya puesto una línea roja en los presupuestos del PP», diciendo que no los aprobará si no hay una partida suficiente, y la unidad de acción sindical y con la asociación Jusapol.

«En épocas de vacas flacas los guardias siempre hemos aportado, pero en época de vacas gordas no recibimos nada», según ha explicado el presidente de AEGC, Francisco Javier Benito, que ha criticado que «se hagan muchas promesas y muchas palmaditas en la espalda, pero al final nada, cuando merecemos el mismo trato que otras policías -ha añadido-».

Opinan también que, tras las manifestaciones en la calle, «ahora toca trabajar en los despachos», según el responsable de UO, Francisco García, que ha subrayado que la Guardia Civil «está en peor situación que la Policía y al avanzar el primer escalón debe ser que se ponga a la altura de la Policía Nacional para avanzar en equiparación con otras policías».

Desde APROGC, su responsable Fernando Ramírez Trejo ha incidido en que la situación en Cataluña ha servido para visualizar que policías y guardias civiles cobran menos que las policías autonómicas y locales «cuando tienen una responsabilidad mayor» y han sido «el azote del terrorismo» y «los garantes de la ley en Cataluña».