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El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha reivindicado este miércoles la investigación interna de la Policía sobre las grabaciones de Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la amiga intima del Rey Juan Carlos I, y ha pedido que se respeten los tiempos de la justicia ya que este caso está judicializado, aunque ha recalcado que intentará «limpiar el cáncer» inoculado por algunos servidores públicos.

«Por un lado hay personas investigadas y en prisión provisional y, por otro, esa cuestión la está llevando asuntos internos de Policía con una profesionalidad importante, eso me ha llegado», ha explicado el titular de Interior en una entrevista en RNE, recogida por Europa Press.

En este sentido ha pedido «confianza plena» en la Policía y en la investigación que está llevando a cabo, y aunque admite que lo que se imputa es un «tema muy grave».

En los últimos días se han divulgado distintas grabaciones de la princesa Corinna efectuadas por el comisario José Manuel Villarejo, que se encuentra en prisión preventiva por delitos de organización criminal, cohecho y blanqueo de capitales, en las que, además de revelar que el Rey Emérito tenía cuentas en Suiza y cobraba comisiones, criticaba la actuación de los servicios secretos españoles hacia ella.

«Respetemos los tiempos judiciales, lo que es cierto es que vamos a llegar a ese ámbito al fondo de la cuestión», ha señalado, añadiendo que se llegará «hasta el fondo y un poco más abajo».

«Si un servidor publico ha contaminado al Estado intentaremos que ese cáncer que nos ha inoculado, llegar un poco más abajo y limpiarlo», ha explicado Grande-Marlaska, sobre las supuestas actuaciones del servicio de inteligencia en relación con la princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein, amiga íntima del Rey emérito Juan Carlos I.

Preguntado si la decisión de un tribunal alemán de entregar al expresident de la Generalitat Carles Puigdemont solo por malversación y no imputarle el delito de rebelión daña a la Justicia española, Grande-Marlaska ha rechazado esta tesis asegurando que las resoluciones del magistrado Pablo Llarena han sido avaladas por otros magistrados Tribunal Supremo.

El exvocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha reiterado que lo que ha expresado el tribunal alemán de Schleswig-Holstein es una «diferencia de criterio», y ha reiterado que hay que mantener el caso en los «parámetros» judiciales. «Las relaciones en estos casos es entre autoridades jurídicas», ha subrayado.