Borrell habla de esta posibilidad como una «solución constructiva» y basada en la cooperación que se enmarcaría en un sistema paneuropeo para apoyar a los países de origen de los inmigrantes, porque España y Marruecos no pueden resolverlo por sí solos.
Es más, cree que una iniciativa así podría gustar a los países europeos «que no practican la política del miedo», es decir, España, Portugal, Francia o Alemania, a diferencia de Hungría, Polonia, Italia o Austria. En esa política del miedo coloca también al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y al nuevo líder del PP, Pablo Casado.
En una entrevista en el diario alemán 'Handelsblatt', recogida por Europa Press, Borrell defiende que hay que dar «incentivos» a los países de origen de los inmigrantes para firmar acuerdos de readmisión para que que quienes no cumplan los requisitos para quedarse en Europa puedan ser devueltos «rápida y eficientemente».
España, explica, los tiene con Marruecos y Argelia, y funcionan sin problemas. También relata que cada año «20.000 trabajadores agrícolas marroquíes vienen a España a trabajar y aprender cómo cultivar vegetales en invernaderos», una formación que pueden utilizar después en su país.
Por otro lado, asegura no tener ninguna queja de la cooperación marroquí para frenar la inmigración ilegal y que está en contacto permanente con su colega de este país, Nasser Bourita.
Para Borrell, si Europa no asume que la frontera externa es una frontera común, existe el gran riesgo de que se reanuden los controles fronterizos dentro del espacio Schengen, y eso es algo que no quiere un país que recibe 30 millones de turistas al año.
Preguntado entonces si no tendría sentido un control temporal de los Pirineos, como única frontera terrestre con el norte de Europa, Borrell replica que espera que no sea el caso y, de hecho, cree que, con 25.000 inmigrantes al año, los números «son tan pequeños que no es necesario».
En su opinión, muchos que vienen de Marruecos y Argelia no se quedan en España porque desde aquí «son devueltos rápidamente».
Borrell desvela además que los inmigrantes cuyo retorno a España pactaron en junio Pedro Sánchez y Angela Merkel son «poco más de 30» y que, por lo que él sabe, ya están todos de nuevo en España.
En cuanto a Francia, el periodista señala que en 2017 Francia devolvió a España 9.000 migrantes por su color de piel, cosa que es ilegal, a lo que el ministro replica que «a veces se mueve uno en la frontera de la legalidad». Según dice, España los acepta porque se trata de «cifras bajas».
Borrell, que admite que la inmigración es un tema difícil de resolver porque toca «miedos identitarios», explica la ausencia de un partido de extrema derecha en España por varios motivos: el hecho de que la mayor parte de la inmigración venga de países latinoamericanos, con los que hay vínculos culturales, la dictadura de Franco que ha «inmunizado» a los españoles a base de «sobredosis» de la derecha, y el hecho de que el PP, caso «único en Europa», haya conseguido aglutinar desde la extrema derecha hasta la democracia cristiana.
Preguntado entonces por el caso alemán, donde Hitler parece no haber servido de 'vacuna' a los seguidores de Alternativa por Alemania (AfD), alega que en Alemania la extrema derecha estuvo en el poder 10 años, aunque «muy intensivos», mientras que en España la dictadura duró 40 y provocó «millones» de exiliados, algo que todavía está en la memoria colectiva.
9 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Todo este follon por una foto de Sanchez junto al Acuarius , que bueno, que humano , que integrador , que tío más majo , lo vamos , lo estamos pagando muy caro.
Dios mio eleciones ya
Solución , cerrar las fronteras, devolver a todos los que han entrado y poner al ejercito.
No tienen ni idea de como salir del problema. Parece ser que el barco del Open Arms, esos que ayudan a transportar inmigrantes ilegales a Europa, ya ha puesto rumbo a España para descargar otros supuestos refugiados políticos. Pedro, como no frenes esto te vas a pegar un bacatazo monumental en las próximas. Ni cincuenta vas a sacar. Y luego los hay que se extrañan el auge de la extrema derecha en Europa.
Que cuqui esta gente que siempre ha vivido del cuento y del postureo y cree que la lismosna es guay y puede arreglarlo todo. Han vivido siempre en el mundo de yupy a costa de los trabajadores y no acaban de pillar que no es porque sean mejores y mas listos. No pillan ni pillaran en su vida que cualquier majaderia que salga de su boca es solo es, una MAJADERIA. No ha hecho numeros sobre lo que propone y sobre todo deberia considerar que aunque los haga y le den la pasta hay que considerar ALTERNATIVAS DE GASTO Y CONSECUENCIAS.
pues... a pesar de que nunca les he votado y dudo wue que lo haga... LA IDEA ME PARECE FANTASTICA!!! Y doy gracias que soy persona capaz de reconocer las buenas ideas independientemente de si las ideas bienen de la izquierda o la derecha... una buena idea NO TIENE COLOR POLÍTICO!
Siguen fuera de la realidad, por qué no enviamos un político por cada migrante, sería más beneficioso para el bien común, y los políticos son todo ganas de servicio público.
Des que diuen que la culpa de que venguin clandestins la tenim per consumir recursos africans mir molt d'on provenen tots els productes i no en compr ni un que vengui d'Àfrica. De moment només he trobat raïm, mongetes i peix. Aquests okupes del govern ens han tirat dins un pou. Pitjor impossible.
Bastaria que la matèria prima que s'extreu d'Africa, se transformás al mateix país on s'extreu, enlloc d'en dur-sen-la. Aixï donaria feina i riquesa. Però aquesta soluciò no interessa a Occident, ni a les multinacionals.